El ex presidente constitucional de Honduras, José Manuel Zelaya, aseguró que Estados Unidos estuvo detrás del golpe de Estado que le apartó del poder en junio de 2009 y que, actualmente en su país, la injerencia de la nación norteamericana no permite que se establezca una reconciliación nacional.
En entrevista exclusiva concedida a teleSUR, Zelaya indicó que tras un año del golpe que lo sacó del poder, Honduras se encuentra sumido en una ola de crímenes, violaciones y asesinatos, sin embargo, aseguró que si el Estados Unidos"saca sus manos de Honduras, los hondureños podemos entendernos".
Indicó que el Departamento de Estado estadounidense, diseña una agenda para que se cumpla en el país centroamericano, esto en beneficio de las trasnacionales norteamericanas presentes en Honduras.
Sostuvo que la lucha continúa y que "tenemos evidencias claras de cuáles fueron las causas del golpe de Estado, qué fue lo que pasó en Honduras y al mismo tiempo qué es lo que hay que hacer para lograr la reconciliación nacional".
A continuación, teleSUR transmite de manera íntegra el texto de la entrevista con el ex presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya.
Un año después volvemos al mismo punto de partida: una Asamblea Constituyente. La cuarta urna fue el motivo esgrimido para el golpe de Estado, ¿Qué puede provocar ahora la realización de una Constituyente en su país?
Recibo desterrado aquí en República Dominicana, gracias al apoyo generoso de este pueblo, a su presidente Leonel Fernández.
Así como su servidor, hay más de 200 personas exiliadas en diferenres partes del mundo, huyendo de dictadura, de una terrible represión, de asesinatos, de torturas, crímenes que se cometen ahora en forma evidente en Honduras. Eso es un Golpe de Estado, una tragedia.
Este fenómeno, que creímos agotado en el siglo XX, surgió en el siglo XXI precisamente en Venezuela, cuando intentaron derrocar al presidente Hugo Chávez. Ahora en Honduras es una interpelación al sistema democrático, aquí se ha puesto en clara evidencia donde están las fortalezas y debilidades de la democracia, aún en los sistemas multilaterales internacionales.
Hoy después de un año de dolor, de sufrimiento del pueblo. Primero la solidaridad mundial, especialmente de los demócratas ha sido evidente, los medios de comunicación, teleSUR, otras grandes cadenas fueron bastiones en defensa de nuestros derechos, y lo siguen siendo, pero la lucha no ha terminado, tenemos evidencias claras de cuáles fueron las causas del golpe de Estado, qué fue lo que pasó en Honduras y al mismo tiempo qué es lo que hay que hacer para lograr la reconciliación nacional.
Yo vi una entrevista que hizo teleSUR al actual mandatario del país, el señor Porfirio Lobo Sosa. Él no está haciendo nada por la reconciliación y Estados Unidos ayudando para que no haga nada por la reconciliación.
Más que desterrarnos, perseguirnos y de privilegiar a los golpistaa, los ha integrado a su Gobierno, les ha dado grandes cargos. Los voceros del dictador Micheletti ahora son sus ministros. Los mismos organizadores y planificadores de todo ese zarpazo contra la democracia están en sus cargos, gozando de privilegios.
Hoy el dictador Michelletti estuvo en las cadenas de radio y televisión de Honduras, conmemorando los que ellos consideran el triunfo de la derecha más reaccionaria y sectaria que ha tenido la humanidad, que está precisamente identificadas con este golpe de Estado.
Nosotros podemos decirle claramente que, después de todos los análisis, las pruebas, las evidencias que tenemos hoy, después de un año, podemos afirmar categóricamente que Estados Unidos estuvo detrás del golpe de Estado y sigue encubriéndolo, protegiéndolo, a quienes usurparon por las fuerzas de las armas el civil de nuestra nación y siguen cubriéndolos, buscándole impunidad.
Yo quiero aprovechar esta oportunidad en teleSUR para hacer un llamado a la comunidad internacional, especialmente a esa comundiad demócrata que se ha mantenido firme, diciendo no a los golpes de Estado.
Nunca jamás, a esa comunidad yo quiero hacerle un llamado precisamente. En Honduras sigue la represión, se han instalado unas elecciones fraudulentas, donde el presidente legítimo estuvo rodeado en la embajada de Brasil por militares, de donde no podía salir, ni ejercer el voto por vigente. Con las elecciones ilegítimas se ha instalado la antidemocracia, que además está siendo promovida, lastimosamente, por ciertos sectores de países, que por quedar bien con Estados Unidos, le dicen sí a todas sus propuestas.
He presentado un plan de reconciliación nacional, para que haya rectificaciones de Lobo y rectificaciones de los Estados Unidos. El gran problema que tenemos para buscar la reconciliación es la injerencia de Estados Unidos, que ha salido favorecido por el Golpe Estado.
Cada una de las acciones que tomó Micheletti, el dictador, y que hoy toma Lobo Sosa son para beneficiar las trasnacionales norteamericanas del petróleo, de las finanzas.
Cada una de las acciones son precisamente para fortalecer lo que a mí se me prohibía, mi relación con el ALBA, por ejemplo. Fue roto el acuerdo con ALBA.
Estados Unidos me prohibía, prácticamente, que tuviese relación con Evo Morales (presidente de Bolivia), Hugo Chávez (presidente de Venezuela), Rafael Correa (presidente de Ecuador), era una molestia cuando yo establecía estas relaciones de solidaridad con estos pueblos, con Cuba, precisamente cuando defendíamos el derecho que tienen los pueblos y nuestra sociedad de mantener niveles de dignidad y democracia.
Hoy todo esto es una evidencia muy clara de que detrás del golpe de Estado estuvo la unión americana, patrocinándolo, encubriéndolo, no lo han podido ocultar, fueron tan grandes sus intereses que no pudieron echarse para atrás y ese es el gran daño que están haciéndole a la democracia latinoamericana, dividiendo a América Latina y dándole un zarpazo a las posibilidades de desarrollo y de progreso.
Lobo se refería a un golpe de Estado que se prepara, con lo cual está denunciando la repetición de la historia, también usted un año después a cambiado su postura con relación a Estados Unidos en este golpe de Estado que sufrió en carne propia y sufre aún el pueblo de Honduras. Específicamente hablemos del Comando Sur.
El Departamento de Estado trató de ocultar su injerencia en el golpe de Estado, desde el principio hicieron todo lo posible, condenaron el Golpe, el propio embajador de Estados Unidos en Tegucigalpa, Hugo Llorens, tomó medidas, canceló visas a los golpistas. Sin embargo, poco a poco no se pudo mantener esa posición y terminaron apoyando la dictadura de Micheletti, apoyando elecciones bajo represión igual como lo hacen en Afganistán, igual como lo hacen en Irak y en otras partes del mundo, no lo queremos para América nosotros ni para esos países.
Después todas las medidas que tomó el señor Micheletti, primero canceló la Ley de participación ciudadana, con la que yo estaba haciendo la encuesta que usted mencionó. Yo estaba haciendo una encuesta basada en una Ley; además, inmediatamente cancelaron todos los privilegios que se le habían quitado a las trasnacionales del petróleo y se lo devolvieron los privilegios a los bancos, a las trasnacionales petroleras americanas, y cumplieron una agenda muy evidente: romper la relación con el ALBA.
Por ejemplo, qué más evidencia que detrás de las decisiones que están tomando, tanto Lobo como las que tomó Micheletti, está Estados Unidos dándole la agenda, dándole la pauta.
Si ellos no estuvieran en eso, los hondureños ya hubiésemos logrado la reconciliación, porque no hemos avanzado, siguen las violaciones a los derechos humanos, sigue la persecución, muchos de mis ministros están fuera de Honduras, perseguidos: Su servidor, el que nunca fue citado en su vida a un juzgado, nunca cfui llevado a ningún tribunal, ni siquiera una citación una demanda, hoy tengo no sé cuantas demandas, órdenes de captura.
Sin embargo, el dictador estuvo en las cadenas de radio y televisión de Honduras dando un discurso de las bondades de su interrupción con los militares en las fuerzas políticas del país, libre, impune, protegido por Estados Unidos y por el Gobierno de Lobo. Esa no es una democracia, creo que hay salidas, pero hay que llamarlos a la corrección, a rectificar, hay que llamarlos a que toquen un poco la conciencia que tienen para detener el baño de sangre que se ha dado en Honduras.
Hay más de 100 personas asesinadas de la Resistencia Popular en el país: maestros, campesinos, obreros, jóvenes.
¿Se hará una denuncia formal contra Estados Unidos por promover este golpe de Estado en su país, continúa esta denuncia que nos hace aquí?
Hay una reunión de cancilleres, programada para el mes de agosto posiblemente, después del informe técnico que van a dar los personeros de la Organización de Estados Americanos (OEA). Nuestras posiciones las estamos poniendo ahí en la OEA.
Ellos, me refiero a los Gobiernos que se han establecido, a los regímenes que se han instalado después del golpe de Estado, han violado todos los acuerdos y resoluciones a nivel nacional y a nivel internacional. Se debería de castigar, estoy totalmente de acuerdo.
No dejar impune ni a los países que apoyan un golpe ni las personas que ejecutan un golpe, ni a los autores intelectuales ni los que ejecutaron materialmente este crimen en contra de la democracia, debería haber un castigo precisamente para eso.
Con la impunidad como resultado ¿Qué aprendizaje queda entonces en la región de esta ruptura del orden democrático, de este papel que desarrolla Estados Unidos?.
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Si Estados Unidos saca sus manos de Honduras, los hondureños podemos entendernos. 
Honduras puede volver a reconstruir pacíficamente la nación. Los logros que alcancé en tres años y medio son los mejores de toda la historia de Honduras, tanto en crecimiento, como en reducción de la pobreza, en gobernabilidad.
Claro toqué intereses, pero intereses que son necesario tocarlo para emprender el desarrollo de un país. ¿Cómo logré el siete por ciento sostenido de desarrollo en tres años? ¿Cómo logré la reducción de la pobreza en más del 10 por ciento?, claro entrando a modificar el modelo neoliberal que ha empobrecido a Honduras, al país más pobre del contienente americano por 50 años.
Esa es la única forma en que las democracias de América Latina puedan fortalecerse, avanzando en sus procesos de participación ciudadana, independizándose del poder hegemónico que desde el norte, en base a la presión, en base a simples dádivas, se quiere imponer a nuestras naciones.
Hay que buscar la independencia económica, pero también la independencia internacional. Cuando me acerque a los países socialistas del ALBA hubo un reclamo de Washignton. Usted no tiene ninguna idea del malestar que se creó.
Cuando firme con Petrocaribe, cuando firmé por el ALBA y los ataques fueron públicos, no fueron privados, el embajador de Estados Unidos en Tegucigalpa atacaba públicamente a (presidente de Venezuela) Hugo Chávez y lo trataba como lo peor. Cuando llegó Hugo Chávez a defenderse en Tegucigalpa, entonces dijeron que el presidente Chávez era el agresivo; esa es la realidad de América.
No se permite que nadie que sea del agrado del norteamericano haga reformas, haga planes, haga planes dentro de la sociedad. Somos pueblos libres y debe de respetarse esa libertad para poder entendernos.
La injerencia es el peor de los caminos para el conflicto que vive Honduras. Si Estados Unidos saca sus manos de Honduras, los hondureños podemos entendernos, si el Gobierno actual trata de ser independiente y no estar sometido simplemente a una agenda de mentiras y de engaños permanente, usando la fuerza y los militares para mantener la presión sobre nuestro país, en nuestra sociedad.
¿Qué propone entonces, que plan de trabaja puede estar activándose para exigir a Estados Unidos que deje de hacer injerencia en su país?
Hay un plan propuesto de seis puntos: primero que no quede impune el crimen del golpe de Estado, que se castiguen a las personas a los autores intelectuales; después que la comunidad internacional sancione a los países que apoyen o apoyaron a la dictadura o que pretenden camuflarla, blanquearla, golpistas asolapados en esta forma tratan de engañar a la nuestras propias sociedades.
Hay que reformar la Carta Democrática de la OEA, para que los países que apoyan un golpe también sean sancionados. Hay que reformar la Carta para darle también un poder a una autoridad a la OEA. A pesar de los esfuerzos que se hicieron, lo reconozco, se fracasó en los intentos de restitución de la democracia en el país. Se hicieron elecciones sin observadores internacionales, con represión, elecciones que nosotros las cuestionamos y las impugnamos, están impugnadas esas elecciones.
Yo creo que nuestra mejor lección es que no haya impunidad en Honduras, que no haya impunidad sobre un crimen, un asesinato y sobre esa tragedia que viven los hondureños. Esa es la mejor lección que le podemos dar al Gobierno.
Señor ex presidente, el Frente de la Resistencia, hoy dialogábamos con algunos de sus miembros y se están recopilando firmas para convocar una Constituyente. Se habla de un millón 200 mil firmas, ¿Se podrá concretar esto, hay voluntad política, qué cambió ahora, un año después?
Hay un manual de golpe de Estado en el Departamento de Estado de Estados Unidos, tres manuales, una vez me dijo Thomas Shannon y se lo digo sinceramente, este golpe fue torpemente ejecutado por malos hondureños y americanos que lo planificaron para ejecutarlo, en el cual lógicamente sólo hay secuelas de dolor y lágrimas.
Después de un año, no hemos podido los hondureños entendernos por la injerencia de la gran vocación antidemocrática que tienen en este caso los que financiaron el golpe para mantener su control sobre el país.
Un Golpe de Estado se da por un propósito, no es un juego como el del dictador Micheletti conmigo, eso no es cierto. Micheletti, hasta tres meses antes del Golpe, era mi mejor compañero en la acción del Estado, pero cuando lo contrataron para ese golpe de Estado y lo contrataron quienes tienen los grandes poderes del mundo, inmediatamente dejó hasta de hablarme, empezó a atacarme inclementemente.
La Resistencia es una fuerza nueva, una fuerza contra la opresión, contra el golpe de Estado, una fuerza contra el militarismo, una fuerza contra el que pretende quitarnos la libertad, y lógicamente a retomado el camino que yo inicie que es el de la participación ciudadana.
¿Cómo le puede negar usted un pueblo el derecho de opinar? Nosotros hicimos la primera Ley en Centroamérica se llama Ley de Participación Ciudadana, la derogó el dictador Micheletti, para consultar al pueblo.
Yo estaba haciendo una consulta legal, sin embargo, por estar haciendo una consulta totalmente legal donde el juez dio una orden, para paralizar el proceso, y le contestamos la orden y en vez de hacer un juicio dieron un golpe de Estado, nosotros contestamos la orden del juez, no hubo nunca desacato en contra del juez, jamás.
Sin embargo, el objetivo de la consulta era que el pueblo pudiera convocarse a una Asamblea Nacional Constituyente después de que el Congreso aprobara una cuarta urna, y que la cuarta urna fuese puesta después de las de Presidente, alcalde y diputados, ¿Dónde está la trampa? Nosotros estábamos jugando limpio con los factores de la democracia, ellos jugaron con las armas, ellos irrumpieron el proceso, ahora el Frente está promoviendo, otra vez, mi retorno y eso se lo agradezco y está promoviendo también la Asamblea Nacional Constituyente, única manera que tiene Honduras de hacer reformas en beneficio del desarrollo democrático libre y participe de la soberanía del poder popular.
¿Cuándo regresa entonces a Honduras, porque Porfirio Lobo en declaraciones dijo que el mismo se había ofrecido acompañarlo y que era usted quien no quería volver?
Usted cree que no quiero ver a mi madre, que tengo meses de no estar con ella, de ver a mis hijos, a ver a mi familia, de ver mi pueblo, por el que luché 30 años para ser presidente y estos bárbaros en 40 minutos de negociación con el Pentágono y con el Comando Sur irrumpieron el orden democrático. Es una ingratitud contra mi, es una injusticia, que lo diga el presidente Lobo, que somos de la misma región y hemos sido buenos amigos en la historia, pero que ahora está atendiendo la agenda de los norteamericanos.
Si él no puede garantizar su propia seguridad, dice que le quieren dar un golpe, cómo va a garantizar la mía. Él quiere llevarme a Honduras para entregarme a los tribunales que organizó Micheletti, a la justicia de Micheletti, a la justicia del dictador, es una propuesta indecorosa, indecente, no solo maquiavélica sino sádica la de pretender hacer eso.
Agradezco si hay alguna buena voluntad de hacer eso, lo agradezco, pero sinceramente mientras esos tribunales, que me persiguen y que tienen inmunidad e impunidad contra quienes dieron el golpe de Estado, prácticamente me están velando mis derechos, mis libertades y la del pueblo hondureño. En Honduras no puede quedar impune ese crimen están procesados ellos en la Corte Penal Internacional.
teleSUR/yi-MFD
Fuente: teleSUR/yi-MFD
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