jueves, 29 de julio de 2010

Honduras: Los ataques contra periodistas y opositores continuos propician un clima de intimidación

Escasos avances en derechos humanos luego a seis meses del gobierno de Lobo

(Washington DC) - A seis meses de que Porfirio Lobo asumió la presidencia, han habido avances muy limitados en Honduras para abordar las graves violaciones de derechos humanos cometidas desde el golpe de estado de 2009, señaló hoy Human Rights Watch. Las amenazas y agresiones contra periodistas y opositores políticos han propiciado un clima de intimidación, mientras que la impunidad por estos abusos continúa siendo la regla.

"Los ataques violentos contra periodistas y opositores políticos han inhibido fuertemente el ejercicio de las libertades fundamentales en Honduras", afirmó José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch. "Cuando los periodistas dejan de transmitir noticias, los ciudadanos abandonan las actividades políticas y los jueces temen ser destituidos por sus sentencias, están en grave peligro los pilares de la democracia".

Human Rights Watch instó al gobierno hondureño a brindar protección a periodistas y miembros de la oposición política, a juzgar a los responsables de las violaciones de derechos humanos y a restablecer la independencia del poder judicial.

Un clima de intimidación

Al menos ocho periodistas y diez miembros del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) -una organización política que se opuso al golpe de estado de 2009 y exigió la restitución del depuesto Presidente Manuel Zelaya- han sido asesinados desde que asumió el Presidente Lobo el 27 de enero de 2010.

Según fiscales entrevistados por Human Rights Watch, también aumentaron significativamente las amenazas contra periodistas y miembros de la oposición durante este período.

Por ejemplo, José Oswaldo Martínez, un periodista de Radio Uno en San Pedro Sula, informó a Human Rights Watch que había recibido varias amenazas de muerte a través de llamadas telefónicas, mensajes de texto y de correo electrónico, entre ellas una recibida en julio que anunciaba: "Como no dejes de hablar de ese perro Zelaya, te vamos a callar la boca de un balazo".

El 15 de junio, Luis Arturo Mondragón, director de noticias de Canal 19 en El Paraíso, fue asesinado a balazos al salir del canal. Aparentemente, había recibido amenazas de muerte por teléfono.

Oslin Obando Cáceres, un conductor de taxi de 22 años de la ciudad de Tela que participaba activamente en el FNRP, permanece desaparecido desde el 13 de junio y se teme que haya sido asesinado. En las semanas previas a su desaparición, Obando y su familia habían recibido varias amenazas de muerte vinculadas con sus actividades políticas.

En respuesta a estos y otros ataques y amenazas, durante la vigencia del actual gobierno la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha dictado 26 medidas cautelares en favor de periodistas, miembros de la oposición política y sus familiares, y ha ordenado al gobierno hondureño que les garantice protección. Sin embargo, según señaló la Comisión en un informe de junio, los esfuerzos realizados por Honduras para implementar esas medidas han sido "escasos, tardíos, deficientes y, en algunos casos, nulos".

Como prueba del cumplimiento deficiente del gobierno, la Comisión citó el caso de Nahún Palacios, director de un canal de televisión en Tocoa, a quien se habían concedido medidas cautelares luego de recibir varias amenazas de muerte. Palacios fue asesinado por agresores no identificados el 14 de marzo mientras conducía hacia su vivienda, y la Comisión criticó duramente al gobierno hondureño por no haberle brindado protección. Varios periodistas y miembros del FNRP que cuentan con medidas cautelares manifestaron a Human Rights Watch que el gobierno no había tomado ninguna medida tendiente a protegerlos.

Las razones de los ataques contra determinados periodistas no siempre son evidentes; en algunos casos -pero no en todos- los ataques parecen estar vinculados con sus críticas al golpe de estado de 2009. No obstante, estas amenazas y ataques, sumados a la violencia contra la oposición política, han generado un clima de intimidación que inhibe fuertemente el ejercicio de los derechos de libertad de expresión, asociación y reunión pacífica en Honduras, expresó Human Rights Watch.

Un periodista de radio relató a Human Rights Watch que en julio un colega renunció a su trabajo en la estación después de recibir varias amenazas de muerte por expresar su opinión política. De manera similar, una opositora política entrevistada por Human Rights Watch afirmó que se sintió obligada a abandonar sus actividades políticas luego de que en marzo ella y sus hijas fueron abordadas por hombres armados. Un miembro del FNRP que recibió un disparo en la pierna durante un intento de asesinato comentó a Human Rights Watch que también había abandonado su participación en actividades políticas a causa del ataque. En cada uno de estos casos, al igual que en muchos otros documentados por Human Rights Watch, los entrevistados pidieron que no se divulgaran sus nombres por temor a sufrir represalias.

Impunidad

La impunidad por los abusos cometidos luego del golpe de estado de 2009 no ha hecho más que agravar el clima de intimidación reinante en Honduras. Hasta el momento, no se ha condenado a ninguno de los responsables de los abusos documentados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Human Rights Watch y otras organizaciones de derechos humanos locales e internacionales.

El 27 de enero, el gobierno aprobó un decreto de amnistía para los delitos políticos cometidos durante el golpe de 2009. Si bien el decreto prohíbe expresamente la amnistía para las violaciones de derechos humanos, el lenguaje ambiguo de la norma -en particular en relación con la amnistía por los delitos de abuso de autoridad- deja abierta la posibilidad de una aplicación excesivamente amplia. Honduras es parte de varios tratados internacionales de derechos humanos que imponen la obligación de investigar y juzgar adecuadamente a los perpetradores y que garantizan a las víctimas un recurso legal efectivo, como el derecho a la justicia, la verdad y a una reparación adecuada.

Si bien la creación este año de una Fiscalía Especial de Derechos Humanos constituyó una medida positiva, los fiscales señalaron a Human Rights Watch que la fiscalía no cuenta con los recursos ni el personal necesarios para investigar la enorme cantidad de denuncias recibidas. Asimismo, las víctimas y los testigos de los ataques a menudo prefieren mantener silencio para resguardar su seguridad y la de sus familias, y esto contribuye a obstaculizar las investigaciones.

Destitución de jueces

La destitución en mayo de cuatro jueces de tribunales inferiores que cuestionaron la legalidad del golpe de estado de 2009 ha debilitado gravemente la credibilidad del poder judicial hondureño.

La Corte Suprema destituyó al Juez Ramón Barrios luego de que se opusiera públicamente una sentencia dictada en junio por dicho tribunal en la cual validaba el golpe. El juez Guillermo López Lone, presidente de Jueces por la Democracia, y el juez Luis Chévez de la Rocha fueron apartados de sus cargos por participar en manifestaciones públicas que exigían la restitución de Zelaya en el poder. La Jueza Thirza Flores Lanza fue destituida por haber presentado dos amparos en favor de Zelaya.

El 28 de junio, estos jueces presentaron escritos de impugnación ante el Consejo de la Carrera Judicial, un órgano revisor designado por la Corte Suprema, y han presentado apelaciones ante el Sistema Interamericano para que revea su caso.

El Juez López expresó a Human Rights Watch que, desde su destitución, varios jueces le han comentado confidencialmente que el temor a ser destituidos por el gobierno influye en sus decisiones judiciales. Un fiscal de la Fiscalía Especial de Derechos Humanos comentó que otros fiscales también habían expresado esta preocupación.

"Los avances para restablecer el estado de derecho en Honduras desde el golpe de estado han sido muy limitados" afirmó Vivanco. "El gobierno debería proteger a los periodistas y miembros de la oposición política que reciben amenazas, impulsar la investigación y el juzgamiento activos de los abusos y reafirmar la independencia de los jueces".

Fuente: hrw.org

Ortéz Colindres's Tongue and the OAS Vote

Oscar Estrada

ORTÉZ COLINDRES'S TONGUE AND THE OAS VOTE
Tuesday at 17:23

Adriane Pine's translation

Enrique Ortéz Colindres, celebrated foreign minister of the de facto government presided over by Roberto Micheletti Bain, famous for having called President Obama an "ignorant little plantation negro", opened his mouth this week in front of the cameras of Cholusat Sur and once again his words leave an echo that reverberates widely behind the fragile curtain that covers Lobo Sosa's country and no matter how the golpista media outlets try to hide and discredit it saying that the lawyer has gone mad, the fact is, Ortéz Colindres knows quite well what he's talking about.

Those who know Ortéz's history know that he has always had the U.S. embassy and Armed Forces behind him, and that he serves as an adviser to them. At a certain point in June of last year he became known as one of the intellectual authors of the ultra-right wing coup adventure, someone who on more than one occasion said before international television cameras that there had been no coup d'etat in Honduras, but rather a constitutional succession and that in that sense the repression that the "resistance" claimed to be suffering was nothing but the product of the imagination of those rebelling.

Now he claims, without hesitation, that it was a Coup d'Etat (that's what he called it) and that it was carried out by the military, in other words that it was a military coup, something that not even the U.S. Department of State would admit, and also that Micheletti was nothing but a "prisoner"—a sort of puppet—of the military leadership that kept him in the position regardless of the consequences.

"We must take these statements very seriously because since he is an adviser to the military then he knows more details than we do," said father Fausto Milla, member of the Comisión de Verdad (True Commission), who added furthermore that "if he has said so, it's as if the armed forces themselves said it."

What is behind the statements of Enrique Ortéz Colindres? What could be behind what seems to be a self-incrimination on the part of the armed forces?

Washington has worked very hard to achieve the international recognition of Lobo Sosa's government. To this end, they have been willing to sacrifice the unwritten agreement that decisions within the Central American Integration System (SICA) be carried out by consensus, and in an unusual summit last week, despite Nicaragua's opposing vote and without the physical presence of the President of the Dominican Republic or the Prime Minister of Belize, SICA proposed the immediate return of Honduras to the OAS.

Because it's quite clear that Lobo urgently needs to return to the international organization and not because the right wing likes the institution, indeed it hurled numerous insults against the organization during the most turbulent weeks of the crisis, stating even—laughably—that if Cuba had managed fine without being in the OAS for 50 years, then Honduras, with its capitalist economy, could equal or even better that record.

Honduras needs the OAS for one simple reason: It is through the OAS that all the international funding passes, and neither the World Bank, nor the International Monetary Fund, not even USAID can distribute funds in the country while the OAS does not recognize it, with exception of emergency funds (hence the abundance of national emergencies declared by Lobo Sosa).

The recognition on the part of one of the executors of the Coup d'Etat of its military character is more that an misstatement; it is a confession of a crime, and in political crimes that is enough to require that judicial systems proceed, (confession, and then disclosure of evidence), apparently further complicating the scene for current Foreign Minister Canahuati and Secretary Clinton.

Obama accepted last August 2009 that what had happened in Honduras was a Coup d'Etat, but he refused to baptize it as military, since U.S. laws prohibit the country from economically assisting a government that rose to power under said circumstances. If now his closest adviser in the country, a lawyer with the embassy for more than 30 years and direct author of the constitutional rupture recognizes that extreme, it means that all this time the White House was lying to the senate and has been violating its own laws.

Worse still, if it was a Military Coup, the elections, just as the Popular Resistance claims, are invalidated since they were carried out under repressive conditions. Lobo Sosa himself had already stated that what happened in the country was a Coup d'Etat. "Call it what you will, but it was a coup," he said, days before claiming that he himself was the victim of a conspiracy being carried out by, in his own words, "a tutti fruti of all colors."

It has become clear that the United States has not managed to muster the necessary votes to reintegrate Honduras into the OAS. That is the reason why the vote was taken off the agenda for July 30th. It is also clear that the issue continues to cause internal problems for the presidents who have shown themselves willing to support U.S. policies, as is seen in the censure to which President Funes of El Salvador has been subjected by his own FMLN party; he could end up without a party as a result of his support for Lobo Sosa.

Insulza, desperate, tries to obtain the backing of Mel Zelaya, offering him an agreement in which the Supreme Court would withdraw the cases pending against him; they have even offered him Micheletti's head within the Liberal Party in return for the incorporation of the FNRP within the official [coup whitewashing] Truth Commission and [Zelaya's] support for the country's entry into the OAS.

In this context, the statements of Ortéz Colindres, recognizable as what for decades has been called within the domestic political scene a "tutti fruti," provide little help in the way of garnering the support of Latin American countries, unless, and here I am speculating, the goal is to satisfy their demands that they be provided, on a silver platter, the heads of the "only ones" responsible for the Military Coup d'Etat of June 28th—The Armed Forces—thus creating the illusion that justice has been served.

OE. 27 de Julio de 2010


LA LENGUA DE ORTÉZ COLINDRES Y LOS VOTOS DE LA OEA
Tuesday at 17:23

Enrique Ortéz Colindres, célebre Canciller del gobierno de facto presidido por Roberto Micheletti Bain, famoso por haber llamado “negrito del batey e ignorante” al Presidente Obama, abrió la boca esta semana frente a las cámaras de Cholusat Sur y una vez más sus palabras dejan un eco que repercute ampliamente bajo la frágil cortina que cubre al país de Lobo Sosa y que por más que los medios de comunicación golpistas traten de ocultar y desvirtuar diciendo que la locura ha alcanzado la cabeza del abogado, lo cierto es, que Ortéz Colindres sabe bien lo que dice.

Quién conocen del curriculum de Ortéz entiende que detrás de él se encuentran siempre la Embajada Americana y las Fuerzas Armadas, para quien funciona como asesor. En cierto momento de la crisis de Junio del año pasado se le conoció como uno de los Think Tanks del golpismo, autor intelectual de la aventura ultra derechista y quien sin contemplaciones dijo en mas de una ocasión ante las cámaras de televisión internacional, que en Honduras no había habido un tal golpe de Estado, sino una sucesión constitucional y que en ese sentido la represión que la “resistencia” decía estar sufriendo no eran sino inventos de los mismos revoltosos.

Ahora dice, sin titubear, que fue Golpe de Estado, (así lo llamó él) y que fue ejecutado por los militares, o sea que fue un golpe militar, concepto que tanto se negó en reconocer el Departamento de Estado norteamericano, así como que Micheletti no era sino un “prisionero” –una especio de monigote- de la cúpula castrense que lo mantuvo en el puesto sin importar las consecuencias.

“Hay que darle toda la importancia debida a esas declaraciones porque si es asesor de los militares sabe más detalles que nosotros”, dijo el Padre Fausto Milla, miembro de la Comisión de Verdad, quien además agregó que “si él lo ha dicho, es como si lo diga las mismas Fuerzas Armadas”.

¿Qué hay detrás de las declaraciones de Enrique Ortéz Colindres?, ¿Qué puede haber detrás de lo que parece una “autoinculpación” de las Fuerzas Armadas?

Washington ha puesto un gran empeño para lograr el reconocimiento internacional del gobierno de Lobo Sosa. Para ello se han mostrado dispuestos a sacrificar el acuerdo -no escrito- de que las decisiones en el Sistema de Integración Centro Americana (SICA) se realizarían por consenso, y en una inusual cumbre la semana pasada, con el voto en contra de Nicaragua y sin la presencia física del presidente de República Dominicana y el Primer Ministro de Belice, se propuso desde el SICA el retorno inmediato de Honduras al organismo a la OEA.

Porque es claro que Lobo necesita urgentemente volver al organismo internacional y no porque la derecha le agrade la institución, que muchos improperios descargaron contra ella durante las semanas agitadas de la crisis, declarando incluso que si Cuba logró vivir 50 años afuera de la OEA –cosa de risa-, Honduras, por ser un país con economía capitalista, lograría igualar y hasta superar el record.

Honduras necesita de la OEA por una sencilla razón: Es a través de ella que entra todo el dinero de la ayuda exterior y ni el Banco Mundial, ni el Fondo Monetario Internacional, ni la Agencia Internacional para el Desarrollo USAID puede desembolsar fondos en el país mientras la OEA no reconozca al mismo, con excepción de fondos destinados para emergencia (de aquí tanta emergencia nacional decretada por Lobo Sosa).

El reconocimiento, por parte de uno de los ejecutores del Golpe de Estado, del carácter de Militar al mismo, más que una infortunada declaración es una confesión expresa del crimen, y en delitos políticos eso basta para que los sistemas de justicia tengan la obligación de proceder, (a confesión de parte, relevo de prueba), complicando aparentemente, aún más el escenario para Canahuatti, actual Canciller hondureño y la Secretaria Clinton.

Obama aceptó el pasado mes de agosto del 2009 que lo que ocurrió en Honduras había sido un Golpe de Estado, pero se negó a bautizarlo como Militar, pues las leyes norteamericanas prohíben que su país ayude económicamente a un gobierno ascendido a través de un golpe de esas características. Si ahora su más cercano asesor en el país, abogado de la embajada por más de 30 años y autor directo del rompimiento constitucional reconoce dicho extremo, quiere decir que durante todo este tiempo la Casa Blanca estuvo mintiendo al senado y han estado violando su propia ley interna.

Peor aún, si fue Golpe de Estado Militar, las elecciones, tal y como lo denunciara la Resistencia Popular, son inválidas pues se dieron bajo condiciones represivas. Ya Lobo Sosa había dicho que lo que hubo en el país fue un Golpe de Estado, “llamelo como quiera, pero fue un golpe” dijo, días antes de denunciar que él mismo estaba siendo victima de una conspiración ejecutada por, en sus propias palabras “un tuti fruti de todos los colores”.
Queda claro que Estados Unidos no ha logrado recoger los votos necesarios para incorporar a Honduras a la OEA. Esa es la razón por la que se sacó el tema de la agenda de la asamblea del próximo 30 de Julio. Queda claro además que el tema sigue causando problemas internos a los presidentes que se han mostrado dispuestos a respaldar la política norteamericana, como lo demuestra la censura de la que ha sido objeto, por parte de propio partido el FMLN, el Presidente Funes en El Salvador, quien podría quedarse sin partido de seguir apoyando a Lobo Sosa.

Insulsa, desesperado, trata de obtener el respaldo de Mel Zelaya ofreciéndole un acuerdo con la corte suprema de justicia de que los casos que están en contra suya serán retirados, han ofrecido incluso la cabeza de Micheletti dentro del Partido Liberal, a cambio de la incorporación del FNRP en la comisión de la verdad (oficialista) y el apoyo para el ingreso del país a la OEA.

En este escenario, las declaraciones de Ortéz Colindres, también conocido desde hace décadas en el mundo de político nacional como “tuti fruti”, poco aportan para conseguir el apoyo de los países latinoamericanos, a menos, y aquí viene mi especulación, que para satisfacer la exigencia de los mismos se les de, en bandeja de plata, la cabeza de los “únicos” responsables del Golpe de Estado Militar del 28 de junio: Las Fuerzas Armadas y se cree así la ilusión que en Honduras se ha hecho justicia.

OE. 27 de Julio de 2010


Honduras: urgencia y esperanza

Efrén Delgado Falcón

«Sigue el maíz a peso, cumpita …aunque algunos digan que ya basta» Indalecio Tuna.

¿Dualidad?
Aunque hay personas que insisten en negarlo, ya que cada cabeza es un mundo, está claro que el proceso electoral recién pasado se celebró en medio de una crisis política, institucional y de los derechos humanos. Fue organizado sin observadores respetables que dieran fe de alguna credibilidad en el proceso, y sobre todo, manipulado por un Tribunal Supremo Electoral claramente politizado, y actuando al interior de un régimen de facto.


Por supuesto, estas circunstancias produjeron lo que tenían que producir: un gobierno débil, que navega haciendo aguas en la tormenta continua de una crisis generalizada.

Entonces, podemos concluir, sin temor a equivocarnos, que el gobierno actual, con toda su institucionalidad, se asfixia en la ilegalidad, y su innegable calidad de írrito --heredada del golpe de Estado-- sigue en vigencia.

Pero una cosa es la legalidad y otra es la realidad. Desde que el gobierno de EE.UU. destapó sus verdaderas intenciones y se dedicó a maquillar, disfrazar y enterrar el “golpe”, validando las elecciones de noviembre último, el régimen presidido por Porfirio Lobo Sosa --al menos formalmente-- funge como si fuera un gobierno legítimamente electo por la mayoría del pueblo hondureño. Por supuesto, nada más falso, pero al mismo tiempo, nada más cierto.

Trago amargo de realidad
El gobierno de Lobo Sosa es una realidad insoslayable: existe y funciona, en toda su extensión; y por muy espurio que pueda ser, que lo es, ha sido reconocido por el país que representa al poder más grande que la historia de la humanidad ha conocido, y el proceso de reconocimiento internacional de tal régimen, tarde o temprano, será mayoritario e innegable. Por tanto, si queremos ser objetivos, una buena dosis de realismo nos obliga a tragarnos esa amarga realidad, y a interrelacionarnos con ella de la mejor manera posible.

Por ello que insistir en conformar una “constituyente”, que enmendaría la ruptura constitucional, no está dentro de las posibilidades del pueblo hondureño, a menos que, para su conveniencia, las personas que controlan el país decidan convocar dicha asamblea, dentro de “su” legalidad y conveniencia. Entonces, la conclusión cae por su propio peso: el único camino que se vislumbra hacia la obtención del poder político es el proceso electoral, cuyo calendario y gestión, dependen enteramente del TSE.

Por lo tanto, acudir a elecciones para marcar el inicio de un cambio cualitativo profundo en el país, es algo prácticamente inevitable. Y ello nos dirige hacia el análisis de escenarios más complejos: las opciones político-partidarias, las alianzas, las coaliciones, los nuevos partidos, los candidatos, el fraude electoral; en fin, las posibilidades y contra posibilidades del futuro político del país. Pero hay una cuestión fundamental donde todo podría conjugar: “El candidato”.

La clave
Derivado de lo anterior, hay una circunstancia que es imperativo resaltar: ninguno de los candidatos atávicos de la política vernácula, tiene una mínima oportunidad para erigirse como presidenciables capaces de zurcir con éxito una porción decididamente mayor del heterogéneo tejido social.

La necesidad de renovación llega como límpida brisa marina, porque todos tienen sospechas de todos, y es que nadie quiere que se siga repitiendo la burda y escandalosa historia de siempre, y la palabra cambio se ha ido infiltrando lentamente en la conciencia y el vocabulario de los hondureños.

Aunque muchos piensan que ya son un anacronismo, no debemos hacer conclusiones apresuradas, el sentido presidencialista y un arraigo centenario por los colores nacionalistas y liberales, siguen encarnados en la conciencia política del hondureño, no obstante, la ruptura ha sido enorme desde el “golpe”. Ahora bien, son muy escasos los potenciales presidenciables con el carisma, la capacidad, la trayectoria, y sobre todo, la fuerza moral para cautivar a las personas de todos los estratos económicos, políticos y sociales del país. Y quizá radica ahí, una de las claves más importantes para desenmarañar la compleja trama de la crisis de la política hondureña.

Urgencia de cambio
Resulta claro que requerimos de un candidato [por supuesto se generaliza, mujer u hombre] que pueda relegar la sospecha y la duda a un segundo plano; que sea capaz de presentarse con una propuesta seria y genuina para el futuro de la nación. Obviamente, no hablamos de caciques, ni de patriarcas, hablamos de un hondureño dispuesto a entregar parte de su vida a la consecución del sueño de una Honduras mejor; un hondureño al que le duela en los más profundo de su ser la pobreza endémica que cría a los hijos de esta tierra; un hondureño que entienda que el bien de los muchos desembocará en el bien de los pocos, pero jamás lo contrario; un hondureño cuya ética esté mucho más allá de las veleidades y las tentaciones del poder; un hondureño sencillo, pero pensante, cuyo sentido común le permita sentarse con los jeques de la nación y con el campesino más humilde, sin perder la compostura ni la idea de que su trabajo va dirigido hacia un bien superior. Si existe tal hondureño, y tiene conciencia de la coyuntura histórica que está viviendo este país, nuestra esperanza será del tamaño de la urgencia de cambio que atraviesa nuestra patria. «Hombres y mujeres íntegros y capaces existen, pero la tendencia natural es a apartarse para que pasen los forajidos, los facinerosos y los cínicos que babean ambición». Amén.


Comunicado del FNRP

FNRPFrente Nacional de Resistencia Popular, ante la continuidad del golpe de Estado, lo grave de las violaciones a los derechos humanos que continúan en el régimen de facto de Porfirio Lobo, la impunidad con que actúan sus hechores y la imposición de políticas que afectan a las mayorías para enriquecer a la oligarquía, comunica a la población hondureña y la comunidad internacional:

1 . Las medidas aplicadas por la dictadura están profundizando el neoliberalismo y han convertido a Honduras en un ?paraíso fiscal y laboral? para las transnacionales, los grandes exportadores y los grandes importadores. Tal intención queda al descubierto en la nueva política de impuestos, en la que quién paga más es el pueblo pobre que el gran capital explotador, que más bien es subsidiado y protegido por el Estado.

2 . Los empresarios que participaron en el golpe, reunidos en el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP) y la Asociación Nacional de Industriales (ANDI), en colusión con el ilegítimo Congreso Nacional, proyectan una ley con la que legalizará y aumentará el trabajo temporal, el trabajo por horas, impidiendo la sindicalización, la contratación colectiva, derogando el código del trabajo y el Estatuto del Docente Hondureño. El resultado de tales políticas será el robo de los derechos a tiempo extraordinario, pago del séptimo día, vacaciones, decimotercer y decimocuarto mes, prestaciones, el pre y post natal de las mujeres embarazadas y jubilaciones a los trabajadores.

3 . Con el mismo propósito de seguir concentrando la riqueza en manos de unos pocos, se han congelado los salarios de los trabajadores y trabajadoras, al impedir el aumento al salario mínimo. Asimismo se planea devaluar la moneda, lo que sumado a la inflación, representa una disminución real de los ingresos de la clase trabajadora.

4 . El presidente de facto sabe que el salario mínimo esta en relación directa al precio que los empresarios venden la canasta básica, que sobrepasa los L 6,500.00 mensuales. La dictadura tolera que los empresarios si tengan libertad para imponer el precio a los artículos de primera necesidad, pero no tiene el valor de fijar un salario mínimo que recupere por lo menos el precio de esa canasta básica, que es cara por culpa de los empresarios dadas sus prácticas oligopólicas, monopólicas y especuladoras que afectan también a los pequeños y medianos productores, que están desprotegidos por el Estado.

5 . Una vez más queda evidenciada la necesidad y urgencia de una Asamblea Nacional Constituyente que redacte una nueva Constitución que proteja los derechos de los trabajadores, trabajadoras y al pueblo en general, y desmonte la institucionalidad golpista enquistada en los tres poderes del Estado, hoy usurpados por la oligarquía para proteger sus intereses.

6 . En ese sentido renovamos nuestro llamado a firmar la ?declaración soberana para auto convocarnos a la Constituyente?, herramienta que el pueblo eligió para establecer su voluntad inquebrantable de refundar la sociedad y el Estado y exigir el regreso seguro del Presidente Manuel Zelaya Rosales así como de todos los exiliados y exiliadas.


7 . Convocamos a una movilización a nivel nacional para condenar la política salarial del gobierno de facto, exigiendo el aumento al salario mínimo, la no devaluación de la moneda, la no imposición del trabajo temporal, la media jornada y el trabajo por horas, y el respeto a los derechos humanos
civiles y políticos, asimismo acelerar el desmantelamiento de la estructura golpista.

La movilización se realizará el día 18 de agosto en todo el país, los responsables de coordinarla son los integrantes de la Asamblea Nacional de Delegados - Coordinación Nacional Provisional y los Coordinadores Departamentales del FNRP.


¡Resistimos y Venceremos!


Tegucigalpa 28 de julio 2010



Comité Ejecutivo del Frente Nacional de Resistencia Popular

Denuncian a Micheletti por violaciones de derechos humanos

Organizaciones de la sociedad civil hondureña interpusieron denuncias por violaciones sistemáticas a los derechos humanos contra el ex jefe del régimen de facto Roberto Micheletti y el ex jefe de las Fuerzas Armadas Romeo Vásquez.

La acusación fue presentada ante la Fiscalía por el Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos en Honduras, el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia y el Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación de la Compañía de Jesús.

Estas agrupaciones responsabilizaron a Micheletti y a Vásquez por varios casos de asesinatos y torturas y por la detención ilegal de 439 adultos y de 43 niños después del golpe de Estado del 28 de junio de 2009 contra el gobierno de Manuel Zelaya.

También los acusaron por las violaciones de las prerrogativas ciudadanas ejecutadas entre el 23 de julio y el 1 de agosto en varias comunidades del departamento de El Paraíso, donde se concentraron miles de personas para esperar al depuesto presidente.

Zelaya fue secuestrado en su residencia y llevado a la fuerza a Costa Rica hace más de un año por militares encapuchados que, en contubernio con la oligarquía, impidieron la celebración de una encuesta en torno a futuras reformas constitucionales.

Tras varios intentos por regresar, primero por el aeropuerto de Toncontín y después por El Paraíso, logró retornar al país el 21 de septiembre, donde se mantuvo alojado en la embajada de Brasil hasta su salida hacia República Dominicana.

"Tenemos más de 200 denuncias de hechos ocurridos después del 28 de junio y ahora trabajaremos en éstas que han sido presentadas", declaró a la prensa Germán Enamorado, coordinador de la Fiscalía Especial de Derechos Humanos.

Fuente: Prensa Latina - mgt/car

¿Habrá guerra entre Colombia y Venezuela?

Modesto Emilio Guerrero

Aunque la reunión de la UNASUR hoy en Quito apunta a impedir semejante locura, lo cierto es que no está descartada tal cosa en la perspectiva actual de los acontecimientos.

Decir algo así podría sonar a tremendismo si las fuerzas en marcha no estuvieran avisando sus propósitos.

De todas maneras, ninguna perspectiva es absoluta en si misma, sobre todo cuando se trata de política internacional, relaciones de Estado y grandes fuerzas sociales en pugna. Una guerra es algo más complejo que el deseo y el objetivo manifiesto de alguna de las partes en juego.

No existen condiciones políticas internacionales o bases sociales internas en ambos países, para prever una guerra de escala, o una invasión lata como las de Santo Domingo en 1965 o las de Panamá y Grenada en 1990. Pero esto no anula o impide los “accidentes” que puedan generarla.

Sobre todo señala la posibilidad de aplicación de las nuevas técnicas de guerra, llamadas de “baja intensidad” o de “cuarta generación”, dirigidas a medrar, fragilizar, desestabilizar y echar, en fases sucesivas o por colapsos internos, a gobiernos desafectos al dominio de Washington.

Tanto el Departamento de Estado, apoyado en el Comando Sur de los Estados Unidos y en sus agencias de seguridad, sobre todo la USAID y CIA, como el actual grupo gobernante de la Casa de Nariño en Bogotá, han dado sobradas muestras en los últimos meses o años, de lo que quieren hacer con el gobierno bolivariano de Caracas y el movimiento social que lo sostiene.

Bastaría recordar que las acusaciones de Uribe, y de Santos mientras fue su Ministro, de sus fiscales, jueces y parlamentarios, contra el régimen venezolano han sido tan sistemáticas que conforman un legajo de demonización dirigido a legitimar acciones de “cuarta generación”.

Revisemos un apretado resumen de hechos: Tres rupturas sucesivas de relaciones políticas en medio de 8 años de resumen malísimas relaciones bilaterales (excepto en lo comercial hasta 2008), dos retiros abruptos de personal diplomático, una hilera de imputaciones y recriminaciones crecientes desde el año 2007, un amague de choque físico entre ambos presidentes en Cancún, en el ultimo verano, la colísion casi militar entre 2008 y 2009 por el bombardeo a Ecuador y a causa de la instalación de las bases estadounidenses, la introducción de un grupo de decenas de paramilitares por la frontera de Cúcuta, protegidos hoy por la Gobernación del Estado Táchira, y lo ultimo: una acusación formal con rango de Estado, y tono escandaloso de preguerra, en el escenario de la OEA.

De algo similar, solo se tiene memoria en excepcionales ocasiones: En 1961, cuando Rómulo Betancourt propuso la expulsión de Cuba de la OEA, en 1964 para legitimar la invasión a Republica Dominicana, después del conato de golpe en Chile el 29 de junio de 1973, o situaciones bélicas consumadas como las de Malvinas, y en algunos casos de golpes de Estado.

Desde Estados Unidos, con Obama y sin el, el asunto es mas serio si consideramos que se trata del imperio dominante del planeta.

Nadie gasta más de 600 millones de dólares cada año en el armamento de un gobierno, sin registrar la ayuda secreta, para hacer diplomacia o desarrollar el turismo tropical. Después de Afganistán, Paquistán, Irak e Israel, Colombia es el Estado que recibe la mayor cantidad de ayuda militar directa del gobierno de Estados Unidos. En ninguno de esos países han ido a jugar al truco, aunque Colombia no haya llegado al mismo nivel de colapso. Pero los hechos de los últimos dos o tres años en el continente, indican hacia donde se dirige el viento.

Las siete bases militares norteamericanas en Colombia, las activadas en Panamá el ultimo año, la segunda que estarían desarrollando en Honduras y las plataformas militares reactivadas en Aruba, Bonaire y Curaçao, frente a las costas venezolanas, ademas los ejercicios militares en Perú, Paraguay y las costas “pacificas” de Chile; otro hecho clave de esa dinámica fue el golpe de estado en Honduras; las recientes maniobras militares en Puerto Rico; la ocupación militar de Haití aprovechando un desastre natural; la flota de 42 buques militares instalados en Costa Rica y las declaraciones pro estadounidenses, de sus socios en el llamado "cordón del Pacífico" (Chile, Perú, Panamá, Costa Rica y México).

Dos presidentes, Micheletti y Martinelli, le han dado voz a estos aprestos atreviéndose a conminar la desaparición de los regimenes de Venezuela, Bolivia y Cuba.

Habrá o no habrá guerra entre Colombia y Venezuela no es cosa de juegos de abalorios o adivinanzas gitanas.

Los datos anteriores son decisivos por su relación con los Estados que los generan, pero hay otros factores que no deben desestimarse en la actual ruleta latinoamericana.

Juan Manuel Santos quiere sentarse en la Casa de Nariño: eso no seria posible si su amigo mete al país en un estado de guerra. Su rol como Presidente no será el mismo que como Ministro ejecutor de la “Seguridad Democrática”. Él no cambia, cambia su rol en el escenario. No olvidemos que la burguesía colombiana quiere recuperar los mas de 6 mil millones de dólares evaporados en el mercado venezolano, y aunque apoyo a la pareja Uribe/Santos en la limpieza militar que hicieron en 8 años, hoy quiere otra cosa. Como lo han dicho ellos mismos, el objetivo actual es reinsertarse en la subregión, comenzando por el mercado venezolano, mejorar las debilitadas relaciones de Estado con la mayoría de los gobiernos, excepto los del “cordón del pacifico” y ver si con Santos logran la firma del TLC en el Congreso de EEUU.

UNASUR adquirió un peso subregional con capacidad de calmar fuegos como lo demostró con la rebelión de la media luna boliviana.

La derecha venezolana resulto la mejor aliada del gobierno colombiano dentro de Venezuela, base social para un ataque eventual; este es un dato revelador: su odio antichavista y su amor a los yanquis le hicieron cambió el tradicional chovinismo anti colombiano, por apoyo a cualquier cosa que sirva para sacar de escena al gobierno bolivariano. Este factor podría generar un “accidente” propiciatorio desde el interior venezolano, algo difícil (pero no imposible) a esta altura del blindaje defensivo en la frontera.

Fuente: aporrea.org

Investigan expertos letalidad del dengue en Honduras

Expertos en control de epidemias recomendados por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) investigan la letalidad del dengue en Honduras, donde hasta hoy se reportan 31 muertos y más de 28 mil 500 contagios.

"Este es el mayor número de fallecimientos que hemos tenido en toda la historia", declaró Tomás Guevara, jefe de vigilancia epidemiológica de la Secretaría de Salud.

Los especialistas consideran poco común la letalidad con que se presenta el virus en una población de siete millones de habitantes, porque las cifras alcanzaron cotas de países con mayor población, incluidos los de zonas tropicales.

Un grupo de entomólogos brasileños realiza esta semana trabajos de campo junto a sus homólogos hondureños en sectores endémicos del distrito central, donde se reporta el 80 por ciento de los casos.

Según especialistas, en el país podrían estar circulando cuatro serotipos de la enfermedad, incluido el dos, considerado el más agresivo, y el tres, que hace 16 años no se registraba en la región.

El dengue, transmitido por la picadura del mosquito Aedes aegypti, provoca fiebre alta, dolor de cabeza y en las articulaciones y, en su variante hemorrágica, puede ser mortal.

Las autoridades sanitarias contabilizaron hasta julio 27 mil 677 casos del tipo clásico y 853 del hemorrágico, las cifras más altas en una década.

Fuente: Prensa Latina - asg/car

Brasil y Nicaragua comparten postura sobre regreso Honduras a OEA

Brasilia, Brasil y Nicaragua coincidieron hoy en que resultan necesarios gestos por parte del gobierno de Honduras para aceptar su reincorporación a la Organización de Estados Americanos (OEA).

Durante un almuerzo con motivo de la visita del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, apuntó que "nuestros países lograron construir una relación amplia y diversa, como parte de la integración regional latinoamericana y caribeña".

La solidez de ese proyecto exige una defensa firme de la democracia en la región, indicó Lula.

"No podemos admitir que el golpe del 28 de junio de 2009 en Honduras se convierta en incentivo a nuevas aventuras antidemocrática" destacó Lula al indicar que la posición de los demás países centroamericanos sobre el asunto es vital.

El golpe de estado en Honduras no sólo sacó al presidente Manuel Zelaya de la presidencia, sino hasta del país. Tras unas elecciones desconocidas por buena parte de la comunidad latinoamericana al realizarse bajo un gobierno de facto, el nuevo gobierno amnistió a los golpistas, pero no a Zelaya.

Por su parte, el presidente nicaragüense compartió la postura brasileña y precisó que "resulta necesario crear condiciones en Honduras para que pueda incorporarse nuevamente a la OEA y en correspondencia también pueda incorporarse al Sistema de Integración CentroAmericano (SICA).

Ese es un reto que tenemos, refirió el presidente Ortega y aseguró que el golpe de estado en Honduras llegó cuando menos se esperaba, cuando ya se pensaba que los golpes de estado habían desaparecido para siempre de la región.

Aunque, recordó, todavía estaba latente y a poca distancia aquel golpe lanzado (el 11 abril de 2002) en Venezuela en contra de su presidente Hugo Chávez. Un golpe derrotado por el pueblo, pero en fin de cuentas es un golpe de estado, subrayó. Ortega señaló que el golpe en Honduras ha provocado una enorme herida al proceso de integración centroamericano y tenemos que trabajar para superar esa situación y para que de esa forma el SICA pueda desarrollar nexos con la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR).

Fuente: Prensa Latina - tgj/ale

Frente al tsunami popular

John Saxe-Fernández

Con la economía bajo gravitación depresiva, el empleo de largo plazo en aumento, los salarios en deflación y una reforma financiera que no evade riesgos sistémicos, el gobierno de Obama intensifica, como lo hizo su antecesor con resultados desastrosos para los derechos humanos y alto riesgo para la paz mundial, el uso de la carta militar para contrarrestar el deterioro hegemónico y la vulnerabilidad económico-estratégica por su inusitada dependencia de recursos naturales esenciales, en especial de combustibles fósiles que importa al 65 por ciento.

La ecuación internacional de poder, impactada por la crisis de acumulación capitalista, el cambio climático y el peak oil (¡en 25 años la demanda mundial de energía aumentará 49 por ciento!), agudiza su multipolarización: vivimos en otra constelación histórica que en América Latina se expresa en incipientes y novedosos mecanismos para fortalecer la soberanía y seguridad regionales, como la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) y significativos procesos de construcción social alternativa, apoyados por amplios movimientos sociales inclinados a tomar en mano propia el manejo de recursos, economía, moneda, defensa y con políticas exteriores favorables a la resolución pacífica de conflictos.

Es un tsunami de soberanía y seguridad popular y regional que interfiere con arreglos oligárquico-imperiales y que EU y sus lacayos combaten a sangre y fuego: del petróleo en aguas profundas del Golfo de México a las arenas bituminosas de Canadá y el petróleo convencional y super-pesado de Venezuela, sin importar costos socio/ecológicos, el Pentágono y las grandes petroleras se aprestan a la toma del botín.

Con la economía y recursos de México y Canadá en el bolsillo imperial, el objetivo inmediato es la revolución bolivariana y su petróleo. Así lo evidencia un mensaje desde EU en que se advierte al presidente Chávez de otra maniobra contra él y la revolución: la fase de preparación de la comunidad internacional, con ayuda de Colombia, está en plena ejecución (con la ofensiva de Uribe contra Venezuela en la OEA, respaldada, como en Honduras, por la Casa Blanca) agregándose que lo que se vive es parte del plan integral...la operación militar va...la realizarán los del norte, pero no quieren entrar directamente en Caracas.

También se revela que se aceleró la fase de ejecución, unido a una fuerza de contención, desde Estados Unidos ...hasta Costa Rica, con el pretexto de la lucha contra el narcotráfico (por el despliegue de 18 mil marines y guardacostas gringos endosado por la presidenta tica Norma Chinchilla y la diputación del Partido Liberación Nacional).

Los altos cargos que ejecutan el operativo anti-bolivariano dicen que los colombianos solos no pueden ejecutar la operación en corto tiempo por lo que decidieron involucrarse directamente, cuando el conflicto se dé. La agresión contra la Venezuela que toma posesión soberana de su renta petrolera viene desde Bush/Cheney. Obama la intensifica usando el smart power que incluye el poder duro contra las coaliciones regionales (Unasur/Alba) fortaleciendo las Fuerzas Especiales y la Cuarta Flota, orquestando el golpe en Honduras, desplegando las bases en Colombia y ocupando con fuerza castrense a Costa Rica; y el poder suave, por medio de vastos subsidios a ONGs, partidos políticos, líderes y montajes de guerra sicológica y política con una enorme ofensiva publicitaria desde medios periodísticos, radiofónicos, televisivos y la red: New York Times, Newsweek, CNN, etcétera, siempre dispuestos a des-informar sobre la región, Venezuela o Chávez.

CNN lo hace con desmedro ético-profesional: ajusta noticieros y análisis económicos a la línea anti-Chávez de la comunidad de inteligencia. Igual de significativo: en Estados Unidos se palpa una veda informativa de la desorbitada militarización e intervención de Estados Unidos en la región, acompañada por el despliegue antipopular de fuerzas especiales en 19 naciones latinoamericanas.

Fuente: La Jornada


El pecado original de Honduras

En Honduras, los problemas no son el golpe de Estado o la crisis política. Éstos apenas son el efecto de la crisis de Estado y galopante desintegración social que carcome al país

Ollantay Itzamná (Abya Ayala) 2010-07-28 19:37:59

Cuando leemos, pensamos y hablamos de la realidad sociopolítica hondureña, en la actualidad, identificamos golpe de Estado, crisis política y económica, corrupción generalizada, desintegración social, resistencia popular, etc. Tendemos a esconder las raíces de nuestros males con estadísticas sobre menores que mueren de hambre, macroeconomía e inversiones fi nancieras en números, porcentaje de analfabetos, cantidades asesinados por bala y dengue.

Con estos y muchos otros detalles más pintamos la realidad hondureña cuando hacemos un análisis de la problemática nacional. Pero, ¿son suficientes estos elementos para comprender la contradictoria y dolorosa realidad hondureña? ¿Es el golpe de Estado el problema de la Honduras actual? ¿Es la rebeldía e insubordinación de la resistencia nacional el problema para la convivencia pacífica en Honduras? ¿Estamos verdaderamente en una crisis política y económica? ¿Cuáles es el pecado original de Honduras que irremediablemente la condena a un destino adverso?

El problema en Honduras no es el sancudo, ni el golpe de Estado. Mucho menos, la pobreza o la crisis política.

El pecado original de Honduras es la exclusión de las grandes mayorías

Varios males estructurales nos acechan como país. Pero el orig en de los males de Honduras se llama exclusión social, económica, cultural y política de las grandes mayorías. Unos pocos, que se autoproclamaron ciudadanos plenos, intentan imponer su visión de país y plan de nación, a espaldas (sin la participación) de las grandes mayorías, subestimando a éstas como a ciudadanos de segunda, bajo la tutela de los primeros. Por eso, Honduras no pudo consolidarse como país, mucho menos como Estado nación.

Existió, existe y existirá malestar económica, política, social, identitaria, etc., pero todas estas crisis se fundan y se afianzan en la crisis de Estado y nación. No pudimos construir el Estado, ni hemos logrado compactarnos como nación, porque jamás nos atrevimos a dar el primer paso para estos cometidos, que es el reconocernos como iguales entre todos y todas.

Honduras, un Estado a fuerza de fusil

El Estado, según la moderna teoría política básica, es la organizació n de un grupo de personas (sociedad) que se reconocen como iguales entre sí. Se organizan para gobernarse, y para cumplir sus acuerdos (leyes) aprobados por ellos mismos. La finalidad del Estado es la construcción del Bien Común (bienestar integral de todos y todas)

En honduras, jamás nos hemos reconocido, entre todos y todas, como iguales. Unos fueron y son más iguales que otros. El desprecio y la exclusión de las grandes mayorías (campesinos, indígenas, empobrecidos, mujeres, obreros, analfabetos, etc.) ha sido y es la regla de oro en toda la cruda historia de Honduras. ¿Quién fundó, y quiénes son los herederos del Estado hondureño? ¿A quiénes protege y beneficia el Estado? ¿Quiénes hacen las leyes, y quiénes están obligados a cumplirlas? En Honduras unas pocas familias (10) nacieron para mandar y gobernar (ellos son ciudadanos plenos), y el resto estamos condenados/as a obedecer como sirvientes. Por eso los patrones se molestan cuando exigimos nuestr o derecho a participar y decidir como ciudadanos plenos.

En otras palabras. Estado jamás existió, ni existe actualmente, para las grandes mayorías de hondureños/as condenadas a la exclusión y al empobrecimiento sistemático.

El Estado, creado por las élites de Honduras, en 1821, no ha podido consolidarse en todo el territorio nacional, mucho menos ha podido sentar su autoridad en todos los segmentos de las sociedades hondureñas disgregadas.

Y, ¿qué hicieron los patrones ante su incapacidad de sentar autoridad mediante el Estado ilegítimo (o inexistente) para las grandes mayorías? Renunciaron a la razón política y recurrieron permanentemente al uso brutal de la fuerza militar/policial para “disciplinar” al pueblo hondureño.

¡No existe, en la historia del país, un solo gobierno que no haya estado sometido a los militares! Si Ud. no me cree, vea el artículo 272° de la actual Constitución Po lítica, síntesis de la democracia a la hondureña. ¡Las élites gobernantes mantuvieron, por cerca de dos siglos, este ilusorio Estado democrático entre simulacro de urnas y fusiles sanguinarios!

Los golpes de Estado, jamás fueron atentados a la democracia hondureña, si no manotazos entre los patrones para alternarse en el poder, a espaldas del pueblo. ¡En Honduras jamás hubo democracia! ¿Acaso no fueron militares quienes promovieron y fundaron los dos partidos políticos (Liberal/Nacional), auténticos instrumentos de dominación política y cultural?

En Honduras actual, el problema no es el golpe de Estado. Esto es la consecuencia de la ausencia de un Estado verdaderamente democrático y soberano. ¡Honduras vive la tragedia irreversible de la crisis terminal del Estado ilusorio fracasado en el intento! Por eso es urgente la construcción de un Estado con todos y para todos/as. El golpe de Estado del pasado año es sólo una consecuencia i nevitable de esta crisis estatal.

Honduras, un Estado sin nación

Ahora, bien. La ausencia de un Estado legítimo y soberano trae consigo la ausencia de la nación hondureña. Nación (comunidad política) y Estado (comunidad política y jurídicamente organizada), en teoría política son las dos caras de la misma moneda. La nación crea y legitima al Estado, y éste consolida y defiende a la nación.

En Honduras, el Estado (actualmente en crisis) existe sin nación (porque no nació de la voluntad legítima y genuina del pueblo), y las grandes mayorías que cohabitan en el territorio del país sobreviven sin Estado. Condenados al reino del revólver y el rifle.

En las escuelas, las iglesias y el cuartel nos inculcan himnos, banderas, fútbol, moneda, héroes, etc., pero, ¿por qué estos símbolos no lograron configurar el sentido de pertenencia a una comunidad política (nación hondureña) en la idiosi ncrasia colectiva? ¿No será porque en estas tierras cohabitan diferentes pueblos (con historias, sueños, grandezas y esperanzas diferentes) sin encontrarse y reconocerse como tales entre sí? En educación cívica nos inculcan valores ciudadanos como libertad, igualdad, solidaridad, justicia, respeto, etc. Pero estos principios no pasan de ser meros discursos teóricos, porque en Honduras unos pocos son más iguales, reconocidos, libres y respetados que muchos otros.

Hacia una Honduras de todos, con todos y para todos

Ante la crisis sistemática del Estado hondureño y ante la desintegración social del país, la violencia emerge y se impone como el único medio de resolución de conflictos. En la medida que recrudecen estas y otras crisis, el país ya no sólo padece un déficit de identidad nacional, sino la figura de autoridad se va diluyendo. Ricos y empobrecidos vamos camino a nuestra destrucción. El valor de la vida se reduce al val or económico de una bala.

En estas condiciones, nuestro instinto de sobrevivencia nos convoca a soñar en una Honduras de todos/as, con todos/as y para todos/as. En esta dolorosa realidad estamos conminados a emprender un camino sin retorno de un proceso de transformaciones trascendentales de largo aliento.

La exclusión y el desprecio de las grandes mayorías, que a su vez generan la galopante crisis estatal y desagregación social, justifican de sobremanera un proceso constituyente soberano y participativo en Honduras para iniciar el proceso de la refundación del país con la participación activa de todos y todas. Así lo están haciendo otros países latinoamericanos que han fracasado en el intento de consolidar un Estado nación excluyendo a sus grandes mayorías.

Este proceso depende del compromiso de cada uno de nosotros/as. Informanos, organizarnos y generar propuestas de cara a la Asamblea Constituyente, como in sumos para la nueva Constitución Política, es nuestra tarea esencial. Es verdad que el nuevo texto constitucional no resolverá de inmediato los efectos urgentes de la sistemática exclusión y discriminación a los que casi nos hemos acostumbrado, pero será un paso significativo y trascendental en el proceso de reencuentro nacional que urge en este momento.

Son agendas pendientes para este proceso constituyente: la propiedad y gestión de todos los recursos naturales del país, la redistribución de la tierra, la soberanía nacional, la transición de la democracia representativa/excluyente hacia una democracia participativa, la desmilitarización de la democracia hondureña, los roles de las fuerzas armadas y de la policía nacional, la diversificación de la economía nacional, la democratización del sistema judicial, el reconocimiento y garantía de nuevos derechos fundamentales de la persona, pueblos indígenas y los de la Madre Tierra.

Las i nstituciones públicas y privadas, o­nGs, iglesias y demás entidades estamos en la obligación moral y cívica de acompañar este proceso. Para ello nuestras tareas urgentes son dos: fortalecer a los movimientos sociales que demandan e impulsan el proceso constituyente, y facilitar espacios de encuentro para la generación y construcción de propuestas concretas hacia la Asamblea Constituyente.

Debemos acompañar este proceso desde los caseríos, aldeas, municipios, departamentos y regiones. La construcción de las propuestas para la nueva Honduras tiene que ser de abajo para arriba. Debemos construir plataformas interinstitucionales, intereclesiales. Campesinos, citadinos, obreros, intelectuales, profesionales, indígenas, mujeres, todas y todos tenemos que consolidar alianzas para emprender el arduo camino hacia la nueva Honduras incluyente y participativa.

Si asumimos nuestra misión de acompañar este proceso histórico, estaremos heredand o a quienes vienen después de nosotros un país redimido de su pecado original. De lo contrario, seguiremos padeciendo la maldición del mito de Sísifo, sumergidos en las Honduras del destino adverso. Entonces, Dios Padre y Madre de la Vida será implacable y nos increpará: “Caín, Caín, qué has hecho con tu hermano Abel. El clamor de su sangre ha llegado hasta mí”.

Fuente: Vos el soberano

Buscando a los desaparecidos - Juventudes en Resistencia


De entre las cosas terribles que trajo el Golpe de Estado Cívico-Militar, la reapertura de las desapariciones forzosa y el asesinato político, se encumbra como el hecho más doloroso que enfrentamos hoy por hoy.
Cuando luchábamos por mantener sin olvido ni perdón lo sucedido en aquellos años, vino la segunda arremetida en el 2009 que se sigue extendiendo y masificando. Una generación inédita en cuanto al sufrimiento de la desaparición y la muerte cercana de amigas y amigos compañeros, se ve ante el deber histórico de unir los hilos de sangre de las mujeres y hombres asesinados, e hilar con ellos la bandera de nuestra repulsa y dignidad.
Las Juventudes en Resistencia organizan este evento, y me han invitado a leer. Mi pequeño aporte es el de toda la poesía de siempre: reconstruir con la palabra, sanar cicatrices en la memoria y fortalecerla. No puedo estar más agradecido con esta invitación.
Fe de errata: no soy el coordinador de Artistas en Resistencia, soy uno más en una organización horizontal compuesta por compañeras y compañeros asumidos en la lucha, capaces de aportar y dirigir sin temor en la construcción del poder popular.

Fuente: Bitácora del Párvulo

CIDH solicita al Estado de Honduras garantizar la vida de Edwin Espinal

Dina Meza
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Edwin Robelo Espinal cuando recibió gas pimienta en sus ojos

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, solicitó al Estado de Honduras medidas urgentes a favor de Edwin Robelo Espinal, con el objetivo de garantizarle la vida y su integridad, debido a los constantes hostigamientos y violaciones a sus derechos de que es objeto por parte de la Policía Preventiva.

El 30 de junio de este año a eso de las once de la noche, Robelo Espinal fue detenido por varios policías que le lanzaron gas pimienta contra sus ojos y los llevaron por varias horas a diferentes sitios de la capital, entre ellos un lugar que podría ser una cárcel clandestina donde le tomaron fotografías y le golpearon, después fue llevado a la Cuarta Estación de Policía, antes de bajarlo de la patrulla fue golpeado nuevamente y al interior su lugar de detención se le negó asistencia médica a pesar de que se estaba asfixiando producto de la toxicidad de los gases.

Robelo Espinal quien es miembro activo del Frente Nacional de Resistencia Popular, FNRP, y esposo de Wendy Ávila, quien murió en septiembre de 2009 como consecuencia de los gases lacrimógenos que policías lanzaron en grandes cantidades contra miles de ciudadanos y ciudadanas que se encontraban en las afueras de la Embajada de Brasil, el 22 de ese mismo mes , hasta donde llegó el presidente Manuel Zelaya Rosales, para tratar de ser restablecido en el poder.

El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH, solicitó ante la CIDH la emisión de medidas cautelares a favor de Robelo Espinal quien continúa siendo objeto de hostigamientos policiales.

“En esta oportunidad cumplo con informarles que en el día de la fecha, la CIDH SE DIRIGIÓ AL Estado en virtud del artículo 25 de su Reglamento, a fin de solicitar la adopción de medidas urgentes a favor de la persona arriba mencionada”, dice una carta enviada al COFDEH con fecha 22 de julio de este año.

La CIDH manifestó en la nota que debido a los antecedentes del caso, es procedente el otorgamiento de dichas medidas cautelares con el fin de que se garantice la vida y la integridad personal de Edwin Robelo Espinal.

Informó que solicitó a Honduras que:

1.-Adopte las medidas necesarias para garantizar la vida e integridad física de Edwin Robelo Espinal.
2.-Concierte las medidas a adoptarse con el beneficiario y sus representantes;
3.-Informe sobre las acciones adoptadas a fin de investigar los hechos que dieron lugar a la adopción de medidas cautelares.
La CIDH también solicitó al Estado hondureño la presentación de información sobre el cumplimiento de las medidas cautelares adoptadas, dentro del plazo de 15 días y actualizar dicha información en forma periódica.

Ver la carta de la CIDH

Fuente: Defensoresenlinea.com

EDITORIAL DE VOCES EN RESISTENCIA : UN FRENTE QUE AVANZA

Editorial FNRP de El Progreso
El pasado sábado 24 de julio se desarrolló en El Progreso la segunda Asamblea Departamental de Yoro del Frente Nacional de Resistencia Popular. Esto en cumplimiento de lo que había resuelto la primera Asamblea celebrada en el municipio de Morazán.

Fue una asamblea en la que prevaleció el interés de los delegados y delegadas de los municipios en discutir sobre las perspectivas de desarrollo del Frente, el fortalecimiento de las distintas áreas de trabajo, la necesidad de hacer un trabajo más coordinado en todo el departamento, cómo vincular la lucha política de resistencia con las demandas de los sectores populares, la importancia de desarrollar el debate alrededor de los objetivos estratégicos del Frente a fin de clarificar para qué estamos construyendo esta novedosa organización del pueblo hondureño y prever que no se convierta en una frustración más, en fin, los y las asambleístas no llegaron con la idea única de evacuar el punto de elección de la conducción departamental, sino de aprovechar lo mejor posible este segundo encuentro para la unificación de criterios sobre los variados asuntos que se ventilan en la resistencia. Fue aleccionador el abordaje del tema de la unidad, alrededor del cual prevaleció la idea del carácter incluyente, democrático y participativo que se ha definido en el Frente, y, que por lo tanto, sus espacios deben estar abiertos para todas las personas que estén sinceramente interesadas en enfrentar a quienes siguen adelante con el proyecto golpista.

La elección de la conducción revistió un verdadero ejemplo de práctica democrática lo que satisfizo a quienes participaban con delegación de sus municipios así como a quienes hicieron acto de presencia en condición de observadores. Posteriormente la integración de seis Comisiones de Trabajo se hizo con la incorporación voluntaria según el interés de cada quien por las diferentes áreas de trabajo.

Después de la realización de esta segunda asamblea departamental del Frente en Yoro seguramente habrá un fortalecimiento de la conducción en cada municipio y el incremento en el número de colectivos, pero también se va a observar un auge y sistematización en la formación, en las actividades financieras y la divulgación de informaciones y orientaciones del Frente.

Nuevamente la ciudad de El Progreso se distingue al haber sido la anfitriona de un evento que marcará pauta en el ejercicio democrático que los organismos de conducción municipal y departamental deben observar.

Es precisamente por la amplitud democrática que caracterizó la Asamblea departamental celebrada en El Progreso que la reunión que en esa misma fecha se realizó en la ciudad de Yoro no ha tenido repercusión alguna ni ha generado mayor confusión. Y es que la Asamblea que se realizó en El Progreso no sólo fue una decisión soberana de la Primera Asamblea que tuvo lugar en Morazán, sino que fue tema de agenda en varias reuniones preparatorias de la conducción progreseña en la que participan compañeros y compañeras que expresan opiniones diferentes alrededor de algunos asuntos.

Desde este programa saludamos a los delegados y las delegadas que conformaron la Segunda Asamblea departamental, les felicitamos por haber sido partícipes de este acontecimiento que constituye un paso importante en el fortalecimiento del Frente y les excitamos a llevar a cabo las tareas que se decidieron en las distintas áreas.

Construimos un Frente que avanza para lograr la Asamblea Nacional Constituyente convocada democráticamente, constituida con la más amplia participación de la nacionalidad y que al promulgar una nueva Constitución interprete las aspiraciones de la diversidad del pueblo hondureño.

Fuente: elprogresoresiste.codigosur.net

FNRP: Honduras es un paraíso Fiscal y laboral para las transnacionales

Dina Meza
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Foto Archivo

Los importadores y exportadores son los beneficiados con las medidas adoptadas por la dictadura que profundizan el neoliberalismo y han convertido al país en un paraíso fiscal y laboral, denunció el Frente Nacional de Resistencia Popular , FNRP, en una conferencia de prensa este día en la capital.

Entre las medidas que profundizan la pobreza están con una política de nuevos impuestos que penaliza a los más pobres; pretensión de legalizar a través de un decreto legislativo el trabajo temporal, por horas, derogación del Código de Trabajo y Estatuto del Docente Hondureño; congelación de salarios a los trabajadores y trabajadoras impidiendo un aumento al salario mínimo.

Se suma a lo anterior los anuncios de devaluar la moneda hondureña que vendrá a disminuir los ingresos de la clase trabajadora en contraposición con un aumento acelerado de la canasta básica, cuyos productos suben sin que el gobierno de facto ponga un alto a la arbitrariedad de los empresarios, que son los mismos que llevaron a cabo el golpe de Estado.

“El presidente de facto sabe que el salario mínimo está en relación directa a l precio que los empresarios venden la canasta básica que sobrepasa los seis mil 500 lempiras mensuales. La dictadura tolera que los empresarios sí tengan libertad para imponer el precio a los artículos de primera necesidad, pero no tiene el valor de fijar el salario mínimo”, señaló el FNRP.

Los problemas antes enunciados evidencian la necesidad y urgencia de una Asamblea Nacional Constituyente que redacte una nueva constitución que proteja los derechos de los trabajadores y trabajadoras y al pueblo en general, y desmonte la institucionalidad golpista enquistada en los tres poderes del Estado, hoy usurpados por la oligarquía para proteger sus intereses, destaca el comunicado de prensa, difundido por el Comité Ejecutivo del FNRP, ante periodistas de medios de comunicación.

Esta organización llamó al pueblo hondureño a firmar la Declaración Soberana para una auto convocatoria a la Constituyente, herramienta que el pueblo eligió para establecer su voluntad inquebrantable de refundar la sociedad y el Estado y exigir el regreso seguro del presidente Manuel Zelaya Rosales, así como de todos los exiliados y exiliadas, agregan.

En la misma conferencia de prensa, el FNRP convocó a una movilización nacional para el 18 de agosto con el objetivo de condenar la política salarial del gobierno de facto , exigiendo al aumento al salario mínimo, la no devaluación de la moneda ni la imposición del trabajo temporal y el respeto de los derechos humanos, además de acelerar el desmantelamiento de la estructura golpista.

En la conferencia de prensa participó el Comité Ejecutivo conformado por: Miguel Navarro, de Olancho; Carlos H. Reyes y Juana Barahona, de Tegucigalpa; Edgardo Casaña y Jaime Rodríguez, por el magisterio; Lily Aguilar, de Lempira; Victor Petit de Comayagua y Porfirio Amador de Choluteca. Como invitados estaban Rasel Tomé y Eulogio Chávez, de la Comisión de Declaración Soberana.

Fuente: Defensoresenlinea.com