Ana María Méndez Flores
“La lucha de emancipación de la mujer proletaria no puede ser una lucha similar a la
que desarrolla la mujer burguesa contra el hombre de su clase; por el contrario,
la suya es una lucha que va unida a la del hombre de su clase contra la clase de los capitalistas.”
que desarrolla la mujer burguesa contra el hombre de su clase; por el contrario,
la suya es una lucha que va unida a la del hombre de su clase contra la clase de los capitalistas.”
Clara
Zetkin
Zetkin
En
la actualidad, el 8 de marzo de cada año se celebra el Día Internacional de la
Mujer. Sobre el establecimiento de este día, en honor a la lucha femenina por la
consecución de la igualdad y la reinvindicación de sus derechos, existen varias
historias. Sin embargo, la idea de la liberación femenina tiene sus orígenes en
los movimientos socialistas, hecho que se ha intentado disfrazar por muchos de
los movimientos que hoy promueven la lucha femenina.
La frase de Marx, “La opresión del hombre por el hombre se inició con la opresión de la mujer por el hombre”, sembró la semilla en los movimientos socialistas por iniciar la lucha por la liberación de la mujer proletaria, como una de las bases importantes para la consecución de la derrota del capitalismo.
Desde 1890, Clara Zetnik, política comunista alemana y luchadora por los derechos de las mujeres, comenzó a organizar mujeres para integrarlas en la lucha social. La primera Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas tuvo lugar en Alemania el 17 de agosto de 1907, en esta conferencia, se decidió establecer una Secretaría de la Mujer, y fue Clara Zetnik la responsable de la misma.
A comienzos del siglo XX, la lucha de las mujeres socialistas se cruzó con el movimiento de aquellas mujeres que buscaban la consecución del derecho al voto, este movimiento estaba integrado en su mayoría por mujeres de clase media y alta. Eran conocidas como las sufragistas y tenían relaciones de conflicto con las mujeres socialistas debido a su visión del mundo y la posición de clases diferentes. Sin embargo, las mujeres socialistas deciden apoyar esta lucha por el derecho a votar; y esto se lleva a cabo en la segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenahgue, Dinamarca: “Las mujeres socialistas de todas las naciones organizarán un Día de las Mujeres específico, cuyo primer objetivo será promover el derecho de voto de las mujeres. Es preciso discutir esta propuesta, conectándola a la cuestión más amplia de las mujeres, en una perspectiva socialista.” Y es así como en agosto de 1910 se instancia el Día Internacional de la Mujer, el cual sería un día para hacer campaña por el derecho al voto y la emancipación política de la mujer, sin quedar definida específicamente la fecha en la cual debería celebrarse.
El 19 de marzo 1911 se celebró por primera vez en Europa el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, como fue declarado originalmente, en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza. En este día se exigía el derecho al voto, al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral. En Suecia y en Italia la primera conmemoración fue el primero de marzo del 1911.
Luego de todos estos acontecimientos de lucha por la mujeres, el 8 de marzo de 1917, a causa del hambre y el cierre de la mayor fabrica de Petrogrado en Rusia, las mujeres salieron en manifestación a las calles y se declararon en huelga; dando inicios de esta manera a la primera fase de la Revolucion Rusa.
En 1921 se realizó, en Moscú, la Conferencia de las Mujeres Comunistas que adopta el día 8 de Marzo como fecha unificada del Día Internacional de las Obreras.
A partir de los años 30 los acontecimientos del mundo, como ser la Segunda Guerra Mundial, las luchas políticas y el nazismo; lograron relegar al olvido las manifestaciones del Día de la Mujer. Pero en la década de los 60 la lucha feminista fue retomada en un proceso de auto organización de las mujeres; y en los años 70 las mujeres socialistas reafirmaban el origen socialista del 8 de marzo utilizando el color lila como color especifico de la lucha feminista.
En 1975 la ONU declaró la década del 75 al 85 como la década de la mujer y el 8 de marzo como el día internacional de la mujer, día que en 1977 fue adoptado también por la Unesco. Sin embargo, estas organizaciones no declaran este día con base en la lucha de las mujeres socialistas por las conquistas sociales y políticas, sino que hacen referencia a un hecho ocurrido en 1911, donde tuvo lugar la muerte de aproximadamente 146 mujeres en el incendio a la fabrica Triangle Shirtwaist en Nueva York, quienes un año antes habían realizado una huelga, sin obtener respuestas favorables, por condiciones de trabajo mas higiénicas y mayores medidas de seguridad en los talleres.
Muchas han sido las mujeres desde principios del siglo XX, quizás desde antes, que han dedicado su vida a la lucha por obtener condiciones de igualdad que les permitan participar de la vida política y de la toma de decisiones de los pueblos; y su lucha también ha sido por mejores condiciones de vida, en cuanto a educación y salud principalmente, para ellas y sus familias.
Hasta el día de hoy la lucha de las mujeres continua y en palabras de Clara Zetnik “El objetivo final de su lucha no es la libre concurrencia con el hombre, sino la conquista del poder político por parte del proletariado. La mujer proletaria combate codo a codo con el hombre de su clase contra la sociedad capitalista”. Han sido obtenidas muchas conquistas, pero la meta es la liberación de la humanidad, donde hombres y mujeres en condiciones de igualdad y franternidad logremos derribar el sistema opresor que nos limita para desarrollar una sociedad mas justa y libre de discriminaciones.
La frase de Marx, “La opresión del hombre por el hombre se inició con la opresión de la mujer por el hombre”, sembró la semilla en los movimientos socialistas por iniciar la lucha por la liberación de la mujer proletaria, como una de las bases importantes para la consecución de la derrota del capitalismo.
Desde 1890, Clara Zetnik, política comunista alemana y luchadora por los derechos de las mujeres, comenzó a organizar mujeres para integrarlas en la lucha social. La primera Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas tuvo lugar en Alemania el 17 de agosto de 1907, en esta conferencia, se decidió establecer una Secretaría de la Mujer, y fue Clara Zetnik la responsable de la misma.
A comienzos del siglo XX, la lucha de las mujeres socialistas se cruzó con el movimiento de aquellas mujeres que buscaban la consecución del derecho al voto, este movimiento estaba integrado en su mayoría por mujeres de clase media y alta. Eran conocidas como las sufragistas y tenían relaciones de conflicto con las mujeres socialistas debido a su visión del mundo y la posición de clases diferentes. Sin embargo, las mujeres socialistas deciden apoyar esta lucha por el derecho a votar; y esto se lleva a cabo en la segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenahgue, Dinamarca: “Las mujeres socialistas de todas las naciones organizarán un Día de las Mujeres específico, cuyo primer objetivo será promover el derecho de voto de las mujeres. Es preciso discutir esta propuesta, conectándola a la cuestión más amplia de las mujeres, en una perspectiva socialista.” Y es así como en agosto de 1910 se instancia el Día Internacional de la Mujer, el cual sería un día para hacer campaña por el derecho al voto y la emancipación política de la mujer, sin quedar definida específicamente la fecha en la cual debería celebrarse.
El 19 de marzo 1911 se celebró por primera vez en Europa el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, como fue declarado originalmente, en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza. En este día se exigía el derecho al voto, al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral. En Suecia y en Italia la primera conmemoración fue el primero de marzo del 1911.
Luego de todos estos acontecimientos de lucha por la mujeres, el 8 de marzo de 1917, a causa del hambre y el cierre de la mayor fabrica de Petrogrado en Rusia, las mujeres salieron en manifestación a las calles y se declararon en huelga; dando inicios de esta manera a la primera fase de la Revolucion Rusa.
En 1921 se realizó, en Moscú, la Conferencia de las Mujeres Comunistas que adopta el día 8 de Marzo como fecha unificada del Día Internacional de las Obreras.
A partir de los años 30 los acontecimientos del mundo, como ser la Segunda Guerra Mundial, las luchas políticas y el nazismo; lograron relegar al olvido las manifestaciones del Día de la Mujer. Pero en la década de los 60 la lucha feminista fue retomada en un proceso de auto organización de las mujeres; y en los años 70 las mujeres socialistas reafirmaban el origen socialista del 8 de marzo utilizando el color lila como color especifico de la lucha feminista.
En 1975 la ONU declaró la década del 75 al 85 como la década de la mujer y el 8 de marzo como el día internacional de la mujer, día que en 1977 fue adoptado también por la Unesco. Sin embargo, estas organizaciones no declaran este día con base en la lucha de las mujeres socialistas por las conquistas sociales y políticas, sino que hacen referencia a un hecho ocurrido en 1911, donde tuvo lugar la muerte de aproximadamente 146 mujeres en el incendio a la fabrica Triangle Shirtwaist en Nueva York, quienes un año antes habían realizado una huelga, sin obtener respuestas favorables, por condiciones de trabajo mas higiénicas y mayores medidas de seguridad en los talleres.
Muchas han sido las mujeres desde principios del siglo XX, quizás desde antes, que han dedicado su vida a la lucha por obtener condiciones de igualdad que les permitan participar de la vida política y de la toma de decisiones de los pueblos; y su lucha también ha sido por mejores condiciones de vida, en cuanto a educación y salud principalmente, para ellas y sus familias.
Hasta el día de hoy la lucha de las mujeres continua y en palabras de Clara Zetnik “El objetivo final de su lucha no es la libre concurrencia con el hombre, sino la conquista del poder político por parte del proletariado. La mujer proletaria combate codo a codo con el hombre de su clase contra la sociedad capitalista”. Han sido obtenidas muchas conquistas, pero la meta es la liberación de la humanidad, donde hombres y mujeres en condiciones de igualdad y franternidad logremos derribar el sistema opresor que nos limita para desarrollar una sociedad mas justa y libre de discriminaciones.