Martínez relató que al preguntar a la mujer quién hablaba, ella colgó el auricular.
Este nueva amenaza contra el COFADEH se da en momentos en que los cuerpos represivos del Estado mantienen una cacería contra varias personas que están vinculadas a la resistencia, algunos de los hechos recientes que nos ponen en alerta son:
El día 3 de febrero fue encontrada muerta la joven enfermera Vanesa Zepeda (29 años), integrante activa de la resistencia desde el golpe de Estado y sindicalista del Instituto Hondureño de Seguridad Social, IHSS, quien salió de su casa a las dos de la tarde y a partir de ese momento no se volvió a tener contacto con ella. Su cuerpo fue lanzado desde un vehículo en las inmediaciones de la Colonia El Loarque, entre las 6:30 y las 7:00 de la noche de ese día. La persecución administrativa a través de audiencias de descargo en el Seguro Social fue el preámbulo de su muerte.
El 2 de febrero, fueron secuestrados temporalmente los jóvenes camarógrafos Manuel de Jesús Murillo Varela, del programa Hable como Habla y Ricardo Rodríguez, del noticiero Mi Nación, por un comando policial con hombres vestidos de civil que los condujeron a una cárcel clandestina donde les aplicaron la capucha hasta llevarlos a perder el conocimiento por asfixia. Además de mantenerlos bajo constante amenaza de cortarles la cabeza y los dedos de los pies si no decían dónde tenían armas y dinero.
Esa misma noche los miembros de la Resistencia Ariel Lobo y Ricardo Domínguez fueron capturados por policías preventivos que los trasladaron a la Posta de El Manchén, ellos también fueron interrogados sobre la tenencia de armas. En agosto de 2009, Ariel Lobo fue víctima de un intento de secuestro por parte de elementos del ejército y hombres vestidos de civil fuertemente armados que realizaban un operativo en el centro de la ciudad.
A mediados de enero pasado fue asesinado en la aldea del Carbonal, el maestro Blas López, líder de la etnia Pech en el departamento de Olancho y miembro activo de la Resistencia.
El COFADEH solicita a la comunidad internacional, en especial de derechos humanos, que se mantenga alerta y exprese su preocupación por la situación existente.
Fuente: www.cubadebate.cu
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