Jorge Canahuati Larach, propietario de El Heraldo y accionista de La Prensa y vendedor irregular de armas, continúa con su labor de desinformar al pueblo hondureño. Canahuati es un terrorista mediático confeso, en la revista Summa de mayo de 2005 dijo:
"El papel de los medios en Honduras es muchísimo más importante que en otros países más desarrollados o con mejores niveles educativos y de cultura, como Estados Unidos o el mismo México. Aquí lo que el periódico diga, la mayoría lo asume como verdad, la sociedad es más influenciable."
Foto de Isy Obeb Murillo manipulada por La Prensa para ocultar la represión del gobierno de facto.
Lo burdo de su proceder quedó demostrado, cuando manipuló la foto de Isy Obed Murillo, borrando los rastros de sangre de su violenta muerte en manos de oficiales del régimen represor golpista. La invención de la existencia de una guerrilla en El Aguán comenzó en marzo y va añadiendo a la trama cada vez que el empresario golpista Facussé masacra campesinos en esa región. Canahuati asume que el pueblo es ignorante, y el día de hoy ha añadido improvisados y chuscos elementos a la ficción. En El Agúan han encontrado "guerrilleros" juveniles, a juzgar por los actores que posan en las fotos.
El pasquín El Heraldo publicó esta nota en marzo sobre las supuestas células de las FARC en El Aguán.
A continuación la ficción del terrorista mediático Canahuati.
Terror en el Bajo Aguán por hombres armados
Sí hay armas de guerra en poder de sujetos que merodean las fincas de palma africana y que siembran el terror en la zona del Aguán.
Ayer, un equipo de reporteros de diario La Prensa, acompañados por un relacionador público de la policía, decidió ingresar a una de las fincas donde fue recibido con disparos de fusiles ilegales.
En el grupo de hombres armados se percibió la presencia de sujetos con apariencia de menores de edad que no podían ni siquiera sostener el fusil asignado.
Estos grupos irregulares salieron al paso de los vehículos en una finca en el sector de El Tumbador. Los disparos los hicieron a eso de las 3:00 de la tarde contra el vehículo que había sido autorizado por la seguridad de la finca para circular por la zona.
El oficial de relaciones públicas dialoga con un grupo armado donde hay dos personas con apariencia de menores.
Territorio marcado
Al llegar a un sector donde estaba colgada una bandera nacional, en señal de dominio territorial, los sujetos salieron de entre las plantaciones.
El grupo armado revisa todos los vehículos de carga que salen con fruta del lugar.
El carro de los periodistas fue recibido con ocho disparos de AK-47 y fue obligado a detener la marcha. Estaban apostados a uno y otro lado de la calle de tierra. Algunos de ellos cubrían sus rostros con pasamontañas. Al menos dos de los sujetos llevaban botas de hule, por lo que se presume que podrían ser campesinos.
Cuando el equipo de prensa intentó ponerse a salvo, los disparos continuaron y desde el grupo se les gritó "párense o los matamos". El policía que los acompañaba a los periodistas, con la cámara fotográfica en su costado y vestido con su uniforme oficial, se acercó al grupo armado para dialogar y lograr que dejaran ir al reportero gráfico.
El grupo de aproximadamente 15 hombres portaba armas como Ak-47, fusiles M-14 y machetes. El oficial le indicó al fotógrafo: "salga de la zona", por lo que el reportero salió corriendo del lugar.
El relato
Luego de ser liberado, el policía dijo que "en el momento que nos encontramos cercados uno de ellos amenazaba al fotógrafo apuntándole, por lo que me dirigí al periodista para decirle que caminara, que se fuera, pero que lo hiciera normal, y para evitar que lo continuaran persiguiendo, opté por quedarme para que no le dispararan al periodista".
"Al mismo tiempo les dije a los hombres que él era un periodista, que estaba en la zona cumpliendo con la misión de informar y que veníamos en un plan de paz".
"Los hombres armados manifestaron que por qué corría, yo les manifesté que yo le pedía que se fuera para evitar ponerlos en riesgo y que para que ellos verificaran quiénes éramos yo me quedaba con ellos, que era un oficial que acompañaba a los periodistas, pero que si hacían uso del arma me iba a ver obligado a hacer uso de mi arma, si le disparaban al periodista. Les dije: por favor, no disparen, porque no deseábamos que el problema se hiciera mayor y que entendía el temor que ellos sentían, pero que no se preocuparan, que no queríamos incomodarlos".
"Ellos manifestaron que se sentían agredidos por las Fuerzas Armadas y los policías porque querían despojarlos de sus armas, por lo que les manifesté que había un desarme general para las personas que no tenían las armas registradas".
El presidente Porfirio Lobo Sosa reveló el martes, en la reunión del Consejo de Ministros, que en la zona había aproximadamente 1,000 fusiles Ak-46 y fusiles M-16.
Además reveló que se había detectado que hay arsenal bélico de más alto poder.
Asimismo, dijo que los informes de inteligencia revelan que hay extranjeros brindando entrenamiento militar.
En ese sentido, anunció una operación masiva y por tiempo indefinido para desarmar a todas las personas que porten armas de grueso calibre y prohibidas por la ley. La presencia de grupos irregulares ha sido un secreto a voces en el sector. Sin embargo, el Ejecutivo dijo que se mantuvo la información bajo reserva para no entorpecer las operaciones que se desarrollan.
http://www.elheraldo.hn/Ediciones/2010/11/26/Noticias/Terror-en-el-Bajo-Aguan-por-hombres-armados
En otra trama para seguir fabricando la ficción de la existencia de grupos armados que apuntan hacia la Costa Atlantica, el día de hoy se dió a conocer que incautaron armas en Puerto Cortés.
Mientras Lobo acusa a campesinos y militariza el Aguán, se reciben cargamentos de armas desde EEUU
Tegucigalpa. Autoridades hondureñas incautaron un lote de armas que entró al país en un contenedor de encomiendas que desembarcó en el atlántico puerto Cortés, se informó hoy.
El vice ministro de Seguridad, Armando Calidonio, dijo que las armas de alto poder fueron encontradas durante la revisión de la primera de 415 cajas que vienen en el contenedor y que las mismas estaban cubiertas en papel aluminio, un material que dificulta su detección a través de los sistemas de alarma que funcionan en la estatal Empresa Nacional Portuaria.
La incautación se realizó en la bodega número cuatro de la ENP. El contenedor venia proveniente de San Francisco, California, Estados Unidos, y era dirigido a personas que radican en el sector caribeño de La Ceiba.
Se trata de un fusil calibre 22, un fusil calibre 30, una escopeta calibre 20, un fusil calibre 270 y una pistola calibre22 así como 5 cajas de municiones 22, una caja de municiones 9 milímetros, 2 cajas de municiones 40, una caja de municiones calibre 45, 3 cajas de municiones 270 , 3 cajas de municiones calibre 306, 50 proyectiles 225 y 60 proyectiles de un calibre no determinado, según los recuentos oficiales.
Calidonio informó que los fusiles tienen incorporadas miras telescópicas de largo alcance, propias para el uso de franco tiradores.
Las armas llegaron a Honduras de forma ilegal por lo que las autoridades continúan inspeccionando el resto de las 414 cajas que forman parte del contendedor.
Nota del medio de derecha proceso digital
Fuente: Vos el soberano