Por Chorompo Gutierrez
Desde entonces, la radio se convirtió en uno de los medios de comunicación más apreciados por los hondureños Con una gran capacidad para adaptarse a cambios sociales y amenazas económicas, la radio creció hasta convertirnos hoy en el país que rompió con la radio monopólica encabezada por Wong Arévalo, Radio América y HRN. Nuevos colectivos radiales han surgido: Radio Uno, Radio Gualcho, Radio Progreso y las Radios Comunitarias. Todas estas emisoras han contribuido a romper el cerco mediático ignominioso de la televisión y radio golpista. Día a día más emisoras independientes del monopolio comunicativo por milla surgen en Honduras, para romper el cerco de mentiras de la oligarquía. En los momentos actuales, la Radio y la televisión oligarca hondureña convertida en la Nínive de la maldad que con garras y cuernos defienden sus intereses y los poderes del Estado encabezados por el "sube y baja", Porfirio Lobo; trata de llamar la atención del público escucha que han perdido, tratan de recuperarlo y para ello hasta campañas de desprestigio a la dirigencia del Frente de Resistencia, se han inventado. La Nínive radial que tiene por dioses el poderoso tintineo de don dinero, ha querido dividir nuestro Frente de Resistencia, agarrándola agresivamente contra la dirigencia del Frente y algunos como Julio Ernesto Alvarado poco les ha faltado para decir elimínenlos.
Es por lo anterior que se hace un gran énfasis en escuchar con gran cautela y suspicacia los programas radiales de apariencia antigolpista y simpatizantes del Frente, porque son ellos los que han focalizado en este contexto el hostigamiento a la dirigencia del Frente y con ello tratan de dividirlo.
La crisis económicas y cambios sociales sin precedentes después del golpe de estado, sugieren la necesidad de diseñar estrategias efectivas de comunicación que le permitan a las radios identificadas con el Frente de Resistencia retener su posición cimera entre las múltiples alternativas que tienen los hondureños para entretenerse y mantenerse informados.
En el mundo La radio siempre se proyectó como un medio cuyas funciones son entretener, informar y educar. Sin embargo, estas funciones no son el fin primordial sino más bien, el vehículo para llegar a la meta principal: Obtener ganancias económicas.
La mayoría de los ingresos se consiguen a través de la venta del tiempo para anuncios comerciales. En la radio, “el tiempo es oro”. Para vender el tiempo hay que mostrar datos de una audiencia dispuesta a consumir lo que el comercio le ofrece. Hay que demostrarles a los anunciantes las conveniencias de “invertir” en mensajes publicitarios a través de la radio. Por lo tanto, la fórmula para alcanzar metas económicas consiste en retener un público (Audiencias) y venderle ese público a los anunciantes.
Durante el golpe de estado y la continuación de este las audiencias radiales en Honduras se han visto afectadas a tal grado que las emisoras tradicionales como Radio América y HRN han perdido mas del setenta por ciento de su antigua audición, por haberse confabulado con el golpe de estado, y por haber mentisos descaradamente y sin tapujos; que les hizo una alternativa poco atractiva, ante la gama de programas de radio y televisión y como efecto bumerang cayeron en el repudio generalizado. La disminución de las audiencias de estas emisoras les ha afectado su industria radial y si las audiencias disminuyen, los anunciantes buscan otros medios para maximizar su inversión publicitaria y la misma oligarquía busca posecionarse de las radios emergentes y destruir a las que no se alineen o a los que no lo hagan.
Ante este escenario mas de ocho periodistas han sido asesinados, las amenazas a medios y periodistas continúan; las radios comunitarias a través del aparato judicial y militar han sido cerradas y algunas otras destruidas. La situación de los medios de comunicación en especial la radio es tal en Honduras; que el Frente de Resistencia fue atacado por donde nadie nunca lo esperó. Amenazas, chantajes, rompimientos e insultos fueron la pauta.
Por otro lado de que le sirve a Wong Arévalo, Radio América, HRN, Canal Cinco y todos sus conglomerados ser los poseedores de anuncios de los comerciantes del COHEP y del Estado hondureño cuando carecen de auditorios y por mas ajustes tecnológicos y ofertas que hagan para hacer atractivos sus medios de comunicación la población los tiene descalificados. En cambio; emisoras como Radio Uno, La Gualcho, Radio Progreso entre sus ajustes mas importantes cuentan con transmitirnos la verdad de lo que acontece en Honduras. Este es su atractivo y por eso los hondureños las demandan. LAS EXIGEN.
La gente de nuestros barrios, colonias y del interior debe saber en si cuales son los programas del Frente, cuales son las emisoras que se identifican con los desposeidos hondureños para que la oligarquía y los infiltrados no nos vuelvan a sorprender.