sábado, 29 de mayo de 2010

Zelaya: “Es imposible cualquier solución si existe impunidad”

Denunció ante el Nobel, Pérez Esquivel, continuadas violaciones a derechos humanos en Honduras

El presidente defenestrado, Manuel Zelaya, mientras estuvo en Argentina, habría denunciado ante el premio Nobel de la Paz (1980), Adolfo Pérez Esquivel, las “graves” violaciones a derechos humanos ocurridas en Honduras, revela una entrevista publicada por un periódico mexicano.

“Es imposible cualquier solución si existe impunidad”, dijo Zelaya a la corresponsal de La Jornada, Stella Calloni.

Aseguró que, si quedan impunes las violaciones a los derechos humanos que ocurren, desde el inicio del golpe de Estado, “seguiremos asistiendo a crímenes”.

Silenciar como estrategia

Zelaya llamó la atención sobre el hecho de que, en su país, ocho periodistas hayan sido asesinados en tres meses, “uno por cada región, para aterrorizar y para que nadie tenga valor de denunciar lo que está pasando en Honduras”.

Lobo no puede dar garantías con terror y con una estructura golpistas

“…Se necesita detener todo crimen, persecución y represión. Garantías reales para todos y para los que están fuera del país”, acotó Zelaya sobre su propuesta de negociación para un posible reconocimiento al régimen de Porfirio Lobo.

“El problema es que Lobo no puede dar garantías con impunidad, porque mientras se mantenga la infraestructura de los golpistas y el terror para la población, nadie puede hablar de garantías”, puntualizó.

Denunció lo que "significa" que en el régimen de Porfirio Lobo, “permanezcan todas las estructuras del golpismo intactas” y se haya nombrado a militares que fueron “cabeza” del Golpe, “en lugares claves, que permiten la vigilancia de la población”.

Una Comisión de la Verdad, golpista

Es “amenazante” para Honduras y América Latina que exista una Comisión de la Verdad “en manos de los golpistas y violadores de derechos humanos, sin la voz de las víctimas”, cuestionó.

“Resulta que nosotros los que no hicimos nada, que ejercimos un gobierno democrático, somos los juzgados. Somos lo que no podemos regresar, mientras los golpistas siguen matando”, ironizó el presidente defenestrado.

Zelaya dijo a la periodista, que lo que él hizo en su gobierno fue “producir hechos apenas posibles que favorecieron a la población abandonada desde siempre.”

A pesar de que “esos cambios se notaron” y produjeron un “crecimiento por primera vez”, y se redujo la pobreza, sólo fueron “medidas moderadas, ya que cada paso que daba, dentro del propio sistema, era impedido [de actuar]”, criticó.

Que Estados Unidos (EU) rectifique

Zelaya refutó, “en qué ayuda al gobierno de Estados Unidos mantener una postura de apoyo a los golpistas”; asegurando que el “sistema represivo” que hay en Honduras “no beneficia, ni al futuro democrático de ese país, y menos a la región”.

Según la entrevista, Zelaya pidió a Estados Unidos, una “rectificación” sobre esa actitud; y habría lamentado que Barack Obama “apoye a los golpistas que aterrorizan al pueblo [hondureño]”.

Expresó lamentar que el gobierno de Obama, que primero no estaba con el Golpe, pero sí la Inteligencia de ese país, “esté apoyando a los golpistas que aterrorizan al pueblo”.

Para Zelaya, esa posición de Estados Unidos, demuestra que “Obama, por una parte tiene una estructura condicionante detrás, y por otra, no ha modificado su política hacia América Latina. Siguen los condicionamientos para los gobiernos de la región”.

“El mensaje con el caso Honduras, es que pueden regresar los golpes militares, ahora con otras armas, más sofisticadas”, concluyó.

Intervención directa, pretendían montarle gabinete

Zelaya relató que desde que comenzó a componer su equipo de gobierno, la embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa, ya le tenía “un listado de nombres que debían integrar su gabinete”.

También recordó cuando John Dimitri Negroponte, que era subsecretario de Estado, le objetó, designar representante de su gobierno en la ONU, al ex rector de la Universidad de Honduras, Jorge Arturo Reina, porque era “comunista”.

A pesar de que Zelaya le argumentó que eran “otros tiempos muy lejanos a los años 80”, Negroponte insistió en que “si Reina sigue pensando lo mismo, es comunista y no voy a apoyar su nombramiento ante la ONU”.

Contó que mantuvo su cometido de nombrar a Reina, en entrevista con George Bush, a quien advirtió sobre las “consecuencias que tendría que Estados Unidos lo rechazara [a Reina], ya que tenía un gran prestigio intelectual en América Latina y otros países”.

Argumentó que relataba esos hechos “para que se entienda lo difícil que era dar cada paso, por más pequeño que fuera”. Pero que, a no dudarlo, “tocó el poder militar, económico y político estadunidense en Honduras y al poder económico más reaccionarios” de su país.

Dado el acecho y las continuas trabas en lograr avanzar hacia el desarrollo para el bienestar popular, Zelaya explica “busqué al presidente Hugo Chávez de Venezuela” para ayudar en el campo de la energía, y recibió apoyo “clave y necesario” de Cuba, en educación y salud. Además de otros países.

Zelaya ha pedido a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que “ayuden a las víctimas en Honduras para que cese la persecución y las muertes”; y al gobierno de Estados Unidos ,“que terminó amparando al golpe y a los golpistas”, que rectifique.

Fuente: Red Morazánica de Información





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