miércoles, 21 de abril de 2010

¡Mate periodistas, la SIP mira para otro lado!

El asesinato de periodistas y la escalada del Terrorismo de Estado en Honduras, una de cuyas víctimas predilectas son los primeros, no perturba a los grandes medios ni mucho menos a la tristemente célebre Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), intransigente defensora de cuanta tiranía se haya apoderado de los países de América Latina y el Caribe y cómplice de las mentiras que, a diario, vomita la "prensa seria" comenzando por el país de sus mandantes, Estados Unidos.

Para la SIP que en Venezuela se procese al dueño de Globovisión por su desembozada apología del golpe de estado del 2002 es un ataque a la libertad de prensa; asesinar periodistas a mansalva, como se describe en este documentado artículo de Santiago O'Donnell, no es problema ni algo que perturbe a la SIP o al gobierno de Estados Unidos, autoproclamado baluarte de las libertades en todo el mundo. Como decía Franklin Delano Roosevelt cuando se lo criticaba por su apoyo a Anastasio Somoza luego de haber asesinado a Augusto César Sandino: "sí, es un hijo de puta, pero es nuestro hijo de puta." La SIP es una fiel continuadora de tan deleznable tradición y protege con fervor a sus propios hijos de puta; que maten a periodistas decentes o torturen a militantes democráticos le tiene completamente sin cuidado. Su pretendida defensa de la "libertad de prensa" no es otra cosa que la vergonzante defensa, a cualquier precio, de los peores intereses y privilegios de nuestras sociedades.

El asesinato de periodistas y la escalada del Terrorismo de Estado en Honduras, una de cuyas víctimas predilectas son los primeros, no perturba a los grandes medios ni mucho menos a la tristemente célebre Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), intransigente defensora de cuanta tiranía se haya apoderado de los países de América Latina y el Caribe y cómplice de las mentiras que, a diario, vomita la "prensa seria" comenzando por el país de sus mandantes, Estados Unidos.

Fuente: www.atilioboron.com





.

No hay comentarios:

Publicar un comentario