El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, pidió hoy a la policía y militares que no repriman al pueblo con el establecimiento del toque de queda.
Zelaya pidió además calma a la población y manifestó que varios jefes policiales y militares le aseguraron que no habrá represión.
Tras su llegada a Honduras este día, el gobierno de facto instauró un toque de queda desde las 16:00 horas a las 7:00 de la mañana del martes (22:00 a las 13:00 GMT).
"Yo estoy en comunicación con miembros de los diferentes cuerpos de seguridad y no va a haber represión; eso es lo que ellos me están ofreciendo y les tomo la palabra", dijo.
Zelaya llegó sorpresivamente hoy a Honduras y fue alojado en la embajada de Brasil, a donde llegaron miles de simpatizantes para exigir su retorno al poder.
Desde el golpe de estado del 28 de junio, se impuso un toque de queda vigente en un inicio a partir de las 21:00 a 6:00 horas locales (de 3:00 a 12:00 GMT), pero fue reducido gradualmente hasta suspenderlo. Fin
Fuente: spanish.china.org.cn
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