SANTO DOMINGO (R. Dominicana).- El ex presidente de Honduras Manuel Zelaya afirmó hoy desde Santo Domingo que no hay "ningún peligro" de un nuevo golpe de Estado en su país como denunció recientemente el actual gobernante hondureño, Porfirio Lobo.
"Yo no creo que haya peligro en ese sentido (...) no veo ningún peligro sobre ese asunto, esas expresiones son de él (Lobo), entonces que las aclare", apostilló.
Zelaya, quien pareció restarle importancia a la denuncia de Lobo, reiteró que desde República Dominicana, donde reside desde el 17 de enero pasado tras salir de Tegucigalpa en calidad de exiliado, no ha tenido "indicios" de que se urdan planes contra el Gobierno hondureño.
Lobo denunció la semana pasada la existencia de un plan para sacarlo del poder, y aunque se ha referido al tema en ocasiones posteriores, ha evitado revelar quiénes están detrás de esas intenciones.
Zelaya habló en el Ministerio de las Fuerzas Armadas antes de pronunciar una conferencia que no se permitió cubrir a los medios informativos pese a que fueron convocados por ese organismo.
En otra parte de sus declaraciones, Zelaya defendió la aplicación de su plan de reconciliación nacional en Honduras como solución a la crisis generada tras el golpe de Estado que lo sacó del poder hace casi un año, y aseguró no sentir "temor" de regresar a su nación.
"Honduras ha iniciado un camino para lograr el reconocimiento internacional (...) la Organización de Estados Americanos (OEA) tiene en su poder nuestro plan de reconciliación nacional que también conocen los presidentes de América Latina", declaró Zelaya.
Sin embargo, el ex mandatario afirmó que en Honduras persiste la represión contra sus seguidores y las violaciones a los derechos humanos.
"El plan de reconciliación nacional determina que no existan desterrados políticos, que no existan exiliados como lo son varios ministros míos sobre los que existen órdenes de captura y que se encuentran en diferentes partes del mundo", reclamó el ex jefe de Estado hondureño.
Zelaya también dijo que se encuentra desterrado "involuntariamente".
"Quiero regresar (a Honduras), no tengo ningún temor más que servir a mi país como siempre lo he hecho", expresó.
El ex jefe de Estado hondureño, quien recientemente acusó al Pentágono de ser parte de los sectores que urdieron el golpe contra su Gobierno, dijo sobre el particular, que su denuncia "no necesita pruebas", ya que sectores de la ultraderecha en EE.UU. se han manifestado en favor de golpes de Estado en Latinoamérica y otras partes del mundo.
"Un golpe de Estado lo generan factores diferentes, intervienen diferentes sectores no sólo de la sociedad, en este caso de Honduras, sino factores externos (...) todos sabemos que Estados Unidos es uno de los países más influyentes en Honduras", exclamó.
Zelaya se refirió también al asesinato ayer en San Pedro Sula, la segunda ciudad hondureña en importancia, de Roland Valenzuela, quien fuera uno de sus funcionarios.
"Lamento mucho la pérdida de este valioso joven político, que deja a tres niños pequeños en la orfandad, y quien fue asesinado por la espalda por un amigo según las informaciones de que dispongo", se quejó, al tiempo de exigir que se haga justicia en este caso.
Fuente: voselsoberano.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario