Dina Meza
Estamos abrumados por el constante flujo de casos presentados ante la institución que incluyen asesinatos, tortura, palizas, violaciones sexuales, secuestros, amenazas de muerte, persecución, la introducción a casas de habitación de miembros del FNRP para sustraer información y el saqueo de los medios de comunicación de oposición, dice parte del texto de una carta enviada por el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH a varios embajadores, a finales de octubre.
La misiva fue remitida a las embajadas de Alemania, España, Italia, Francia y la Unión Europea, para destacar los hechos que ponen en grave riesgo la vida de miembros de la resistencia, medios de comunicación de oposición y defensores y defensoras de derechos humanos.
En relación a las acciones que debiera haber implementado el régimen, el COFADEH señala que “ninguno de estos delitos ha sido procesado y muchos de los funcionarios implicados en estos abusos han sido elevados a puestos más altos dentro del aparato de seguridad estatal”
Deseamos alertarle acerca de las condiciones muy duras que los defensores de derechos humanos enfrentamos en toda Honduras en este momento, agrega el documento.
El COFADEH le advierte a los embajadores acreditados en Honduras que bajo presiones de la comunidad internacional, el gobierno de Lobo ha intentado producir la impresión de que aborda el tema de los derechos humanos al crear el Comisionado de Derechos Humanos con rango de ministro asesor al Presidente de Honduras, una Unidad Especial de Investigación de violaciones a los derechos humanos dentro de la Secretaría de Seguridad y la creación una Secretaría de Justicia y Derechos Humanos del Estado
Pero, aunque existan estas instituciones, las violaciones a los derechos humanos, y especialmente los de naturaleza política continúan selectiva y sistemáticamente, aun no son adecuadamente investigados o procesados. En la opinión de la comunidad de derechos humanos, todas estas medidas no son nada más que una campaña mediática diseñada para limpiar la imagen de un régimen manchado cada vez más por la represión.
“Nos decepciona que algunos gobiernos apoyen estas medidas vacías y que las usen como evidencia que el régimen de Lobo este progresando en el tema de los derechos humanos. Le aseguramos que en Honduras no se evidencian mejoras reales, especialmente para el creciente número de víctimas de ataques políticos”, destacan.
Por último el COFADEH dijo en la carta que respalda con todo el corazón las medidas que los embajadores pudieran recomendar a sus gobierno de no apoyar financieramente a las Fuerzas Armadas y al Ministerio de Seguridad en tanto la represión y la ruptura del orden democrático continúe en nuestro país.
Asimismo se refiere al reingreso de Honduras a la Organización de Estados Americanos el cual no debería de producirse mientras que los abusos continúen sin una respuesta efectiva del Estado. Además, permitir que un gobierno integrado por actores claves de un golpe de Estado reingrese a la OEA crea un terrible precedente en una era cuando la democracia, tras años de lucha, ha echado raíz a lo largo de la región.
Este es el texto de la carta:
Tegucigalpa, MDC.,
28 de octubre del 2010
Señor
Embajador ………..
Su Despacho
Excelentísimo Señor Embajador:
De parte del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), deseamos expresar nuestra profunda preocupación por el triste estado de los derechos humanos y el orden democrático en Honduras. Esperamos sinceramente que estas condiciones mejoren.
Nuestro país sigue amenazado por violencia política y ataques contra los medios de comunicación y periodistas independientes críticos del golpe de Estado del 28 de junio del 2009. COFADEH y otros organismos de derechos humanos estamos abrumados por el constante flujo de casos presentados ante la institución que incluyen asesinatos, tortura, palizas, violaciones sexuales, secuestros, amenazas de muerte, persecución, la introducción a casas de habitación de miembros del FNRP para sustraer información y el saqueo de los medios de comunicación de oposición. Aunque ya existían altos niveles de violencia en gobiernos anteriores, la persecución política se ha generalizado desde el golpe.
Las autoridades del Estado aun no han llevado a cabo ninguna investigación efectiva de estos delitos, en los cuales frecuentemente se involucran las fuerzas de seguridad del Estado. Ninguno de estos delitos ha sido procesado y muchos de los funcionarios implicados en estos abusos han sido elevados a puestos más altos dentro del aparato de seguridad estatal. Para mayor información, le invitamos a examinar nuestro reporte recién publicado sobre la situación de los derechos humanos en Honduras, así como el testimonio que presentamos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos el día 25 de Octubre del presente año, ambos de los cuales se incluyen adjuntos al presente.
Además deseamos alertarle acerca de las condiciones muy duras que los defensores de derechos humanos enfrentamos en todo Honduras en este momento. Desde el golpe de Estado el 28 de junio del 2009, las organizaciones hondureñas de derechos humanos hemos sido sistemáticamente marginadas, ignoradas y denigradas por parte del fiscal del Estado y otras agencias claves del gobierno, mientras que varios de sus miembros han sufrido ataques y amenazas de muerte. En varios casos, a los defensores de derechos humanos se nos niegan la posibilidad de acompañar a las víctimas de violaciones mientras buscan la justicia, aunque seamos sus representantes legales, haciendo imposible investigar adecuadamente ni proveer consejo jurídico en casos urgentes.
Mientras que defensores de derechos humanos hemos sido cada vez más marginados, estigmatizados y atacados, el gobierno ha creado de manera expedita instituciones vacías supuestamente dedicadas a defender los derechos humanos. Bajo presiones de la comunidad internacional, el gobierno de Lobo ha intentado producir la impresión de que aborda el tema de los derechos humanos al crear el Comisionado de Derechos Humanos con rango de ministro asesor al Presidente de Honduras, una Unidad Especial de Investigación de violaciones a los derechos humanos dentro de la Secretaría de Seguridad y la creación una Secretaría de Justicia y Derechos Humanos del Estado. Pero, aunque existan estas instituciones, las violaciones a los derechos humanos, y especialmente los de naturaleza política continúan selectiva y sistemáticamente, aun no son adecuadamente investigados o procesados. En la opinión de la comunidad de derechos humanos, todas estas medidas no son nada más que una campaña mediática diseñada para limpiar la imagen de un régimen manchado cada vez más por la represión.
Nos decepciona que algunos gobiernos apoyen estas medidas vacías y que las usen como evidencia que el régimen de Lobo este progresando en el tema de los derechos humanos. Le aseguramos que en Honduras no se evidencian mejoras reales, especialmente para el creciente número de víctimas de ataques políticos.
Respaldamos con todo el corazón las medidas que usted le pudiera recomendar a su gobierno de no apoyar financieramente a las Fuerzas Armadas y al Ministerio de Seguridad en tanto la represión y la ruptura del orden democrático continúe en nuestro país. Tampoco debería apoyar el reingreso de Honduras a la Organización de Estados Americanos mientras que los abusos continúen sin una respuesta efectiva del Estado. Además, permitir que un gobierno integrado por actores claves de un golpe de Estado reingrese a la OEA crea un terrible precedente en una era cuando la democracia, tras años de lucha, ha echado raíz a lo largo de la región.
Esperamos que su importante mensaje resuene en los más altos niveles de su gobierno.
Saludos sinceros.
Atentamente,
BERTHA OLIVA DE NATIVI
Coordinadora General
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