El titular del régimen hondureño, Porfirio Lobo, anuncio, ayer, en cadena nacional de radio y televisión, con repetición esta mañana, la libre contratación de personal de salud.
La que se ampara en una declaratoria de “emergencia” por el dengue hemorrágico, emitida en reunión de titulares de las funciones ministeriales de Estado.
Según las escuetas declaraciones de Lobo "se contratarán más médicos para atender a la población atacada por este virus y se garantiza el acceso de los enfermos a los hospitales públicos de Honduras".
Dijo que “a pesar de los esfuerzos” de su régimen, han muerto 9 personas por el dengue hemorrágico, y se necesitan acciones de “emergencia”.
Emergencia
Sin embargo, Lobo, que regresó ayer mismo, en la tarde, regreso de Sudáfrica donde asistió a la inauguración del Mundial de Fútbol, y a dos partidos de la selección hondureña.
Se fue dejando atrás la conocida expansión invernal del dengue, y sin resolver dos huelgas de hambre, una del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Sitraunah), en la que uno de los huelguistas lleva más de 55 días sin alimentos sólidos.
Al irse Lobo, también, quedó burlada una espera, de más de cinco meses, de los trabajadores, por el ajuste al salario mínimo, que debería haber ocurrido en enero, y a más tardar en abril, de conformidad a la Ley.
El 27 de junio, Porfirio Lobo y su gabinete, la mayoría simpatizantes o partícipes del golpe de Estado, cumplen seis meses en el control de las funciones de gobierno.
Conflictividad laboral y chamba política
Más de seis mil empleados, que hacía dos días habían ocupado los edificios de los dos mayores hospitales de Honduras, para exigir aumentos salariales, fueron desalojados.
El titular de Salud, Arturo Bendaña, dijo a periodistas que "esas acciones se tomarán contra los empleados que impidan el ingreso de pacientes a las instalaciones hospitalarias del Estado".
Inspectores de trabajo levantarán actas a quienes se nieguen a cumplir el decreto ejecutivo, “en virtud de que estamos atravesando una emergencia en el área de Salud, que pone en riesgo la vida de los seres humanos”, dijo.
Miles de activistas políticos del Partido Nacional, de Porfirio Lobo, han reclamado, también, en manifestaciones públicas, lo que consideran su derecho a tener un empleo en las oficinas estatales.
En Honduras no existe la carrera pública, y cada cuatro años que hay cambio de gobierno, éste hace despidos masivos de funcionarios, para emplear a los activistas políticos del nuevo partido en el poder.
Sin embargo, la insuficiencia de fondos en que, el golpe de Estado, dejó al país, ha impedido pagar las prestaciones laborales a miles de empleados que serian cesanteados. Al menos en una secretaria de estado, se denuncia la entrega de hasta cincuenta “sobres”, con despidos, en un día.
Podrán militarizar hospitales
Cuerpos de Seguridad intervendrán los centros y hospitales donde los trabajadores se tomen las instalaciones, interrumpiendo y “poniendo en grave riesgo la vida de los seres humanos”, según el titular de Gobernación, Áfrico Madrid.
Y agregó que: “… primero está el bien común de los 8 millones de hondureños y luego están los intereses de los diferentes sectores gremiales u organizados”.
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