miércoles, 8 de septiembre de 2010

Kosovo

La Secretaría de Relaciones Exteriores ha informado que, en los próximos días, Honduras reconocerá a Kosovo como un Estado independiente, y seguirá el proceso para establecer relaciones diplomáticas con el nuevo país.

La subsecretaria de Política Exterior, Mireya Agüero, ha dicho que esta decisión se tomó en vista de que la Corte Internacional de Justicia sostiene que “la autoproclamada independencia no contraviene ninguna norma del Derecho Internacional”.

Por su parte, el secretario de Relaciones Exteriores, Mario Canahuati, ya ha tenido un acercamiento preliminar con el ministro de Relaciones Exteriores de Kosovo, Skender Hyseni, precisamente en función del proyectado reconocimiento.

De acuerdo con la práctica diplomática hondureña, Honduras no reconoce Estados. Simplemente establece relaciones con los ya existentes. Esta es la primera vez, entonces, que, apartándose de la tradición, nuestro país actuaría de manera diferente y sin duda en forma controversial.

Desde 2008, que nosotros sepamos, ha habido gestiones informales para inducir a Honduras a que reconozca la autoproclamada República de Kosovo, cuya secesión no es reconocida por Serbia, que considera a Kosovo, dentro de su territorio soberano, como provincia autónoma.

Hasta ahora 71 países integrantes de la ONU y la República China en Taiwán han reconocido a Kosovo como Estado independiente, cuya autoproclamación fue apoyada por Estados Unidos, el Reino Unido de Gran Bretaña y Francia. Siendo así un Estado emergente con una población que no llega a los 2 millones de habitantes, casi en su totalidad musulmanes sunitas.

Dicha autoproclamación ha sido rechazada por varios Estados, entre ellos Rusia, España, Sri Lanka, Argentina, Venezuela, Argelia, mientras que otros Estados como Brasil, México, Chile, Uruguay, Indonesia y Tailandia esperan la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU, donde se discute este complicado asunto.

Como se sabe Kosovo, un país balcánico, fue parte de la antigua Yugoeslavia, que compartían diferentes etnias, y que se desmembró después de la Segunda Guerra Mundial al pasar a ser parte de Serbia. La última guerra entre serbios y croatas fue, básicamente, un conflicto étnico-religioso en el centro de Europa.

Por supuesto, el reconocimiento de la República de Kosovo, tal como se plantea en el caso de Honduras, es curioso por no decir sorprendente, ya que, como vemos, está pendiente de resolución en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en el que, como se dice comúnmente, se resuelven los problemas de las grandes ligas, en las que nuestro país no tiene arte ni parte.

Las razones de esta decisión, entonces, deberían ser explicadas por la Secretaría de Relaciones Exteriores, puesto que se trata de un asunto bastante complejo que, de no ser ventilado definitivamente, podría causarle a Honduras incomodidades en el futuro con otros Estados que tienen o podrían tener conflictos similares.

Fuente: tiempo.hn


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