Tegucigalpa. 16 Septiembre 2010. Indignación popular se manifestó en numerosos llamadas telefónicas del público por la agresión policial a la Radio Uno, en San Pedro Sula, donde la Policía lanzó bombas lacrimógenas directamente a la emisora y contra la manifestacion de la Resistencia local durante la conmemoración de los 189 años del asesinato de Francisco Morazán por la oligarquía independentista.
Mientras los comunicadores, Eduardo Coto y Karen Mejía, acongojados manifestaban indignación y llamaban al pueblo con acceso a Internet, a enviar torrentes de mensajes internacionales para que se supiera en el mundo la represión policial contra el pueblo y la libre expresión y manifestación.
Mejía, anunció que como Frente de Resistencia “ya hemos enviado a los organismos internacionales de derechos humanos, porque han incursionado con violencia en la Radio UNO”.
“…hoy es día de los ‘romeos’, de los ‘michelettis”, día de fiesta de los generales y coroneles que se llenaron los bolsillos con el dinero que pagó la turcada para dar el golpe de Estado”, manifestó Coto.
Según ha sido denunciado por el propio presidente Manuel Zelaya, el golpe de Estado fue impulsado por las 10 familias, en su mayoría de origen palestino, que ejercen el poder fáctico en Honduras.
El periodista se refería al general Romeo Vásquez Velásquez, a Roberto Micheletti y a la cúpula militar, que ejecutaron el golpe de Estado y a las celebraciones tradicionales de independencia que eses grupo hace.
“Es día de tristeza para las familias humildes que fueron gaseadas en La Plaza Resistencia”, contrastó Coto.
Un adulto mayor de 70 años, lotero de la plaza, quien padecía de asma, murió asfixiado por los gases. Y, se ha asegurado la muerte de una niña; aunque fue confirmada anoche por llamada telefónica a esa radio, no hubo más información. Sre eportó que hubo 37 personas detenidas, ya liberadas.
Las nubes de gases alcanzaron a los niños, las niñas, adultos mayores que participan de la manifestación, o que simplemente se encontraban en el parque.
Varios grupos de familias que participaban de la movilización de la Resistencia, quedaron temporalmente disgregadas.
Agregó Coto que se supone que el ataque policial fue ordenado por el alcalde, Juan Carlos Zúniga, o a inciativa del sub comisionado, Iván Mejía Velásquez, jefe de la Policía sampedrana.
Críticas al humanismo cristiano del régimen de Porfirio Lobo.
Coto lamentó que en Hondura, los jóvenes son “gobernados por una banda de criminales, por gente que no tiene conciencia de lo que es el humanismo de lo que es el derecho”.
Y crítico: “Cuál justicia social, con esa sonrisa socarrona han visto a los padres y madre a sus hijos, con esa sonrisa taimada, con esa sonrisa fingida, este es el gobierno de los turcos voraces e insaciables, de esos turcos que llenaron el bolsillo del general y coroneles de las Fuerzas Armadas de Honduras para perpetrar el Golpe”
Un golpe bajo contra el pueblo en Resistencia.
Los abogados en Resistencia se fueron a las postas a tomar nombres y a proteger a los periodistas que arriesgaron sus vidas para informar al pueblo, dijo Coto.
Carlos Román de Café Guancasco resultó con una herida en la pierna al igual que Ernesto Bardales, a quien le fracturaron una pierna y “la policía se ensaño con él”.
El poeta Cesar Lanza, denunció que “han golpeado salvajemente a Ernesto Bardales”.
Lanza, aseguró que “se trató de un plan preconcebido, en cuanto nosotros íbamos a doblar por la segunda avenida ellos ya tenían una tanqueta lista”.
Dijo que hubo represión en Choluteca y en San Pedro menos en Tegucigalpa: “posiblemente porque se encontraba la esposa de Zelaya y mostrar al mundo que ellos no son agresivos, sino que es la Resistencia. La policía presentó un arma. Es una canallada lo que hizo Iván Mejía con respaldo del ejército porque se culminaría en la Catedral”.
Varios instrumentos musicales y equipo de algunos de los artistas en resistencia fueron destruidos en el ataque policial. Se mencionó que fueron perjudicados, Mario de Mezapa y Café Guancasco.
La Policía prioriza el ornato de la ciudad, antes que la vida humana.
A pesar de que los policías se mantenían en la plaza, hasta cerca de la una de tarde, la gente regresaba al lugar y dijeron que los policías les decían “váyanse mierdas de aquí… tan bonita que estaba la ciudad y la han venido a arruinar”, reveló una oyente en llamada telefónica.
Medios tradicionales inculpan a la Resistencia y pretenden justificar la reacción policial de acuerdo a la versión misma de la Policía.
Fuente:voselsoberano.com
Fuente:voselsoberano.com
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