Adolfo Facussé, presidente de la ANDI, dice que no vale la pena educar al pueblo hondureño, y presenta como “alternativa” que todos los pobres se vayan a escuelas privadas, sin saber que muchos de ellos apenas sobreviven con veinte lempiras al día.
Tegucigalpa. Para el eterno presidente de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI), el golpista Adolfo Facussé Handal, es mejor que se cierren las escuelas, ya que “no dan ningún beneficio alguno” al pueblo hondureño.
Las palabras del representante de los industriales surgen cuando el gremio magisterial exige al gobierno la cabeza del secretario de Educación, Alejandro Ventura Soriano, y la devolución de más de tres mil millones de lempiras al Instituto Nacional de Previsión del Magisterio (Inprema) que fueron utilizados por la dictadura de Roberto Micheletti para asesinar al pueblo.
Según Facussé, no existe sentido de que hayan escuelas públicas, porque para él, son mejores las escuelas privadas y hay un alto grado de educación y mejor rendimiento por parte de los estudiantes.
Adolfo Facussé propuso durante la dictadura, que los empresarios dieran descuentos en todos los establecimientos comerciales para todos aquellos que fueran a votar, y que de esa forma “se fortalecería la democracia”, ante el desconocimiento por parte de la comunidad internacional al régimen que usurpó el poder en junio de 2009.
Fuente: ellibertador.hn
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