Eso es lo que se cree en el Congreso Nacional. Por eso solicitaron ampliar de 8 a 15 años el tiempo de internamiento para menores infractores en centros de reclusión con condiciones infrahumanas, que en lugar de rehabilitar a los niños y jóvenes los pervierten más.
Fue el diputado nacionalista, Rolando Dubón Bueso, quien mediante un proyecto de decreto que presentó ante el pleno de la Cámara Legislativa pide esa medida.
El congresista considera que con lo solicitado se contrarrestarán los constantes hechos delictivos que se cometen en el país.
El proyecto de decreto, mediante el cual se reforman los artículos 198 y 204 del Código de la Niñez y la Adolescencia, también contempla que las acciones en contra de los niños infractores de la ley, prescriban en 10 años.
Sin embargo, Dubón Bueso en su propuesta, no presenta fundamentos claros de cómo esta disposición contribuiría a disminuir los altos índices de delincuencia.
¡Una medida inútil que traerá complicaciones!
“Es una vieja sugerencia de este señor y de otros que nunca han logrado demostrar con ningún diagnósticos, las razones para creer ese extremo. Tendrían que indicar que los menores de 18 años son la principal causante de la criminalidad”, refuta en contra del proyecto de ley presentado, el ex diputado suplente por el partido Unificación Democrática y defensor de os derechos de la niñez, Tomás Andino.
Andino considera la propuesta, una medida inútil. “Va a traer complicaciones, porque van a meter al centro de internamiento a muchachos que lo van a congestionándolos. Lo que se debe atacar es a la alta delincuencia, depurar la policía, hacer una represión a quienes cometen delitos de cuello blanco. Estas son las verdaderas raíces del problema delincuencial, no atacarse con niños y adolescentes”. Afirmó.
Andino retrotrae con la presentación del anteproyecto, la ausencia en el país, de verdaderos centros de reclusión de menores, que contemplen a su vez, programas de rehabilitación y reinserción social de los menores infractores.
El Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia –IHNFA- es la entidad del Estado, rectora de las políticas de ambos sectores. Sin embargo es una institución que destina tres partes de su presupuesto, al pago de sueldos y salarios.
Administra centros abiertos, semi-cerrados y cerrados, como Renaciendo, en el que se recluye a los menores infractores. Sin embargo padecen males endémicos entre los que sobresalen raquíticos presupuestos que a duras penas alcanzan para alimentar a sus inquilinos.
El centro de reclusión de menores infractores Renaciendo, es el claro ejemplo la necesidad de un cambio. Revistazo.com realizó en el pasado reciente, diversas investigaciones sobre las condiciones infrahumanas, en las que viven estos jóvenes.
Su infraestructura no es acorde a las necesidades de los jóvenes. Los programas de desarrollo, talleres y personal no capacitado para ejercer la labor de orientador social, también se citan en la crisis de un centro que alberga un promedio de 200 jóvenes, pese a tener una capacidad de 120.
“Es absurdo, no creo que se resuelva nada, es una especie de distractor con el que pretende desviar la atención de agentes sujetos que realmente mantiene los verdaderos índices de delincuencia”, dijo al final de la entrevista Andino.
Fuente: Revistazo.com
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