Los Estados Unidos se pintan solos cuando se trata de impulsar operaciones para derrocar a un presidente popular y democráticamente electo, especialmente cuando un pueblo, partido, movimiento popular o presidente deja de pensar en el color verde del dólar, como ocurrió en Honduras. Lo que claramente fue un Golpe de Estado, para la ideología neoliberal fue una transición democrática. Obama sigue insistiendo que en Honduras vive en democracia desde el 28 de Julio del 2009, por lo que su administración “demócrata” sabe seguir y operativizar igual que los republicanos las recetas del pentágono. Para muchas personas lo que está de por medio son los intereses de las enormes corporaciones y de la oligarquía hondureña lo que está en juego.
Basta con las declaraciones descaradas de su administración, en voz del embajador de EEUU ante la dictadura hondureña, Hugo Llorens quien dijo "Nosotros obviamente reconocimos la calidad de la elección que ocurrió el 29 de noviembre, que fue una elección libre y transparente y que hubo un mandato muy claro para don Porfirio Lobo". Declaraciones publicadas en la página de Telesur Noticias.
Paso a paso el Golpe de Estado se fue pintando con la marca registrada Made in USA. EEUU complacientemente les dan el visto bueno a los golpistas para que realicen ejecuciones extrajudiciales, desapariciones, torturas, persecuciones, presos políticos, violencia sexual a mujeres a manos de sus gorilas, militares y policías. Aún así la resistencia del pueblo hondureño se mantiene.
A cambio de toda esa brutalidad les ofrecen amnistía, honores, condecoraciones, tratados comerciales, cooperación militar, que no nos sorprenda si proponen a Micheletti para el Nobel de la Paz. Es evidente que el capitalismo necesita reponerse de un leve dolor de cabeza, para eso al Imperio Norteaméricano le es imprescindible, que sus empresas transnacionales y su proyecto guerrerista para América Latina se torne más feroz cada día, así podrá recuperar su hegemonía económica, política, ideológica y militar en la región.
En el contexto internacional América Latina y especialmente Centroamérica para los Estados Unidos, sigue siendo su patio trasero como se le conoció desde el inicio de la guerra fría, ante lo cual los pueblos retoman el papel movilizador y de lucha como clase trabajadora, por sus derechos como pueblos indígenas, como movimiento feminista, reclamando y defendiendo su autodeterminación, la redistribución de la riqueza, profundización de la democracia y justicia social, por lo que ven debilitada su hegemonía, control y ganancias comerciales, especialmente cuando se encuentran con gobiernos que impulsan verdaderos procesos de verdadera soberanía y no les permiten injerencias de ningún tipo un ejemplo de esto lo constituyen los gobiernos centroamericanos encabezados por el Frente Sandinista en Nicaragua, el Frente Farabundo Martí en El Salvador y el giro de 180 grados que tomo el gobierno constitucional de presidente de Honduras José Manuel Zelaya, que para nada les cayó en gracia. Por lo que el Imperio con la administración de Obama busca garantizar el sometimiento de los pueblos, recurriendo a ocupaciones militares, terrorismo mediático, golpes de Estado y otras acciones intervencionistas como lo hicieran sus antecesores en Guatemala en 1954 contra el presidente Jacobo Arbenz Guzmán, o cuando financio la contra en Nicaragua, y a las dictaduras militares en todo el istmo y el genocidio.
El pueblo hondureño aun no ha dicho la última palabra a pesar de la pólvora, gases, censura mediática y represión. Para la población hondureña mayoritariamente el modelo económico es disfuncional en su país. El sistema electoral y de partidos políticos es solo una farsa más del sistema, controlado por la cúpula militar empresarial y oligarca.
Para el pueblo hondureño seguro del país que necesita ha madurado en su lucha, exigiendo el restablecimiento del orden constitucional, el retorno de su presidente popularmente electo y que se aplique todo el peso de la justicia a quienes de una u otra manera han violado los derechos humanos de la población que ha tenido que pagar el precio de pensar y actuar humanamente y no con el color del dólar.
"La Vida es lucha y se Lucha Siempre"
Fuente: www.albedrio.org
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