martes, 16 de noviembre de 2010

Guardias del árabe Miguel Facussé asesinan a campesinos en el Bajo Aguán

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La denuncia sobre la agresión de los guardias privados del árabe Miguel Facussé la han realizado miembros del Movimiento Unificado Campesino del Aguán (MUCA) que desde el lugar de la represión, también han confirmado que nueve personas se encuentran heridas sin posibilidad de trasladarlos a un centro asistencial, ya que la balacera por parte de los sicarios continúa.
Redacción Central/EL LIBERTADOR 
Tegucigalpa. Más de cuatro campesinos han sido asesinados por parte de guardias privados del terrateniente árabe Miguel Facussé en la aldea “El Tumbador” en Tocoa, Colón, a 545 kilómetros al este de Tegucigalpa, en un enfrentamiento que comenzó desde tempranas horas de la mañana. 
La acusación la han realizado miembros del Movimiento Unificado Campesino del Aguán (MUCA) que desde el lugar de la represión.
En horas de la noche de ayer, las autoridades habían identificado los cuerpos de Ignacio Reyes, de (48), Teodoro Acosta (35) Ciriaco Cárcamo (edad desconocida) y otro cadáver que no había sido identificado. 
Al mismo tiempo, organizaciones populares del departamento de Colón (este) también denunciaron a que el agroindustrial de ascendencia árabe ha importado desde Colombia paramilitares para que neutralicen a los campesinos que desde meses atrás vienen luchando para que les sean devueltas las tierras, arrebatadas en la década de 1990, en el gobierno de Rafael Leonardo Callejas.
Por su parte, el asesor del Instituto Nacional Agrario, Ramiro Lobo, manifestó hace instantes que el director de la entidad César Ham ha dado órdenes para que de inmediato se resuelva el conflicto; también agregó que desde hace meses se "requirió a Miguel Facussé a través del apoderado legal de éste para que acreditara la documentación sobre las tierras" pero hasta el momento no han obtenido respuesta. 
Entre las tierras que están en disputa -señaló- se encuentran los predios del antiguo Centro Regional de Entrenamiento Militar (CREM) que está en las cercanías de Trujillo, que le pertenecen al Estado y no a Facussé Barjum, por lo que pide la intervención del presidente Porfirio Lobo Sosa para solventar el problema que tiene a agudizarse.
Además, el vocero de la secretaría de Seguridad Leonel Sauceda descartó que policías colaboren con los paramilitares y dijo que un contingente se está trasladando al lugar para apaciguar los ánimos entre los dos bandos.  

Fuente: ellibertador.hn

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