El golpe de Estado sigue siendo noticia, y lo seguirá haciendo hsta cuando el mismo acabe, pues está más que claro que el nuevo mandatario de facto del país es la continuación del golpe de Estado y de la dictadura militar instalada en el país luego de la asonada castrense del fatídico 28 de junio, que contó con el respaldo de los Estados Unidos.
Menuda forma de querer abrirse al mundo del presidente de facto de Honduras, Porfirio Lobo Sosa, decir que tiene los brazos abiertos al mundo, pero que no irá en contra de la ideología y los intereses de Estados Unidos por ende, ó sea señores estamos ante un régimen abiertamente servil a los intereses norteamericanos.
Esta declaración de Pepe deja en posición más comprometida a Estados Unidos, porque desvela que tras el golpe están los intereses de los mismos Estados Unidos, y Pepe les será servil, por eso Estados Unidos anda viendo con desesperación como lograr reconocimiento internacional para el golpista Lobo Sosa, pues aparte de ser un cachorrito servil para ellos, es la cara que quiere darle de legitimidad al golpe que apoyaron.
Lo curioso es que los golpistas hablaban de injerencia extranjera, y que Honduras es de los hondureños, cuando ellos son los verdaderos entreguistas y títeres, son títeres de los Estados Unidos nada más ni nada menos, la injerencia extranjera está en el apoyo al golpe de Estado por parte del imperio norteamericano, en una agresión contra América Latina y en un método descarado de su “política exterior” implantado desde principios del siglo XX en esta región del mundo, instalando verdaderas barbaries, dictaduras, y cercenando las democracias, provocando el retraso que hoy vemos en esta zona del mundo.
Honduras ha tenido gobernantes ultraconservadores entreguistas a Estados Unidos, y lo peor es que el país se baja los pantalones por culpa de esta gente y no vemos beneficio alguno, sea declarando la guerra a Alemania como sucedió en la II Guerra Mundial, la instalación de una base militar de forma inscontitucional de Estados Unidos en Honduras, hasta múltiples golpes de Estado promovido por el imperio yanqui e incluso un TLC con Estados Unidos totalmente favorable para la potencia, y desfavorable para Honduras, los mismos reaccionarios prefirieron quedar bien con el imperio, a beneficiar al país, ahí está su “alto” sentimiento patriótico.
Esas personas siguen engañadas creyendo que Estados Unidos le va a resolver los problemas a Honduras, y que por ende debemos entregar nuestra dignidad de pueblo a ellos, a pesar de que han pasado las décadas y no pasa, no captan que Estados Unidos no le resolverá nada a Honduras, por lo que es irónico que alguien que dice llamarse Presidente, porque a un golpista no se le puede llamar de esa forma, vele por los intereses de un país extranjero, en lugar de velar por el interés de Honduras, país del que supuestamente es Presidente, esto explica de dónde tanta apología a Chávez en el golpe, pues estrategas norteamericanos y venezolanos estuvieron infiltrados en el mismo golpe, con ataques al Presidente venezolano al puro estilo de la prensa norteamericana y derechista golpista venezolana, pues así se van atando los cabos, ideologizar el problema, y que Honduras importe al enemigo ideológico de Estados Unidos, ó sea sudar calenturas ajenas, vender que Chávez es enemigo de Honduras, cuando ante los ojos del imperio en realidad es enemigo de Estados Unidos, ahora ya entendemos por dónde pasa la campaña fascista de desinformación y apología al odio de los usurpadores de poder.
Por más que quisieron convencer al pueblo con esta política fascista no pudieron, si no que consiguieron que surgiera una Resistencia nacional liderada por el Presidente Constitucional, que tiene hoy por hoy herido de muerte al bipartidismo, y destrozado al partido político que inició el movimiento golpista.
Represión garantizada
Estados Unidos siempre necesita un cachorro fascista para detener el progresismo de América Latina, en el pasado fue el chileno Augusto Pinochet, en la actualidad en sudamérica es Alvaro Uribe, quién le entregó la soberanía nacional a Estados Unidos para agredir a Venezuela, y miren cómo es el libreto, al imperio le importa el reconocimiento al régimen de facto de Lobo Sosa, y lo mandó a él como el primer presidente que visita a Honduras para reconocer a Lobo, los imperialistas son tan predecibles y evidentes.
Uribe, recibe muchísimo dinero de los Estados Unidos para poderse sostener en el poder, y recibe el apoyo de Washington en sus intenciones reeleccionistas, algo que curiosamente cuando no es lacayo de el imperio, les parece que es anti democrático, hay dinero de la droga, feroz represión en suelo colombiano, medios de comunicación mediáticos, en fin, el mandadero anti-revolucionario del imperio.
Ahora quieren convertir en un nuevo Uribe a Pepe Lobo, quién como cachorrito deberá seguir fiel al guión lo que le diga el imperio, un “presidente” que vive con el terror todo el tiempo de que no le den el golpe a él, se miró con lo del militar de migración, y ahora se mira cuándo abiertamente es titiritero del imperio norteamericano, y no queremos ni pensar que vengan a instalar más bases norteamericanas en Honduras.
Pero a diferencia de Uribe, Pepe Lobo no tiene el respaldo del pueblo hondureño, y hay una resistencia nacional que supera tranquilamente su caudal político, el mismo 27 de enero se vio cuando Pepe no fue capaz de llevar 30,000 personas al Estadio Nacional, mientras en cambio en las calles dirigiéndose hasta el aeropuerto habían más de 300,000 hondureños en Tegucigalpa, claro, este hecho lo oculta la prensa golpista, para que el mundo no vea que en realidad el golpe no es respaldado por Honduras, que la reconciliación nacional no existe, que una reconciliación no es una repartición de puestos en el gobierno como hace Pepe, peor cuándo se llena de golpistas, una reconciliación y solución a la crisis no pasa por un acuerdo inservible que ni firmó el señor Lobo, un acuerdo que solo sirvió para tratar de oficializar un golpe de Estado.
En la misa conmemorativa al hallazgo de la virgen de Suyapa, en dónde vemos con repugnancia cómo se levanta la cruz de cristo por manos de asesinos de verde olivo, el golpista Porfirio Lobo amenazó al pueblo hondureño con reforzar las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, reforzar las fuerzas de seguridad que han masacrado, y asesinado a este pueblo, si alguien duda que la dictadura militar continúa, pues que abra los ojos.
Ahora miramos al embajador de Estados Unidos visitando a los actores del régimen de facto actual, en pleno circo del imperio norteamericano, en una elección que el mismo imperio sabe que no fue votada y fue fraudulenta, pero que avala porque a ellos no les importa Honduras, ni el sentir y pensar del pueblo, no les interesa la grave crisis político-social que han provocado, al imperio solo le importa sus intereses más mezquinos de dominación, que no le ha traído nada bueno a Honduras.
De por sí se callan ante las muertes y la grave situación de derechos humanos en Honduras, algo que es del conocimiento del Departamento de Estado, pero que a pesar de ello, nunca fue condenado ni denunciado por ellos, ¿por qué será?, pues es que los golpistas hondureños son los peones del imperio yanqui y los tienen que proteger.
Fuente: honduras.redeshn.com
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