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TeleSUR _ Hace: 05 horas
El mandatario constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, aseguró este sábado que no aceptará "ningún acuerdo de retorno a la presidencia para encubrir el golpe de Estado", en una misiva enviada al mandatario de Estados Unidos, Barack Obama.
"En mi condición de Presidente electo por el pueblo Hondureño, reafirmo mi decisión que a partir de esta fecha cualquiera que fuera el caso, yo no acepto, ningún acuerdo de retorno a la presidencia, para encubrir el golpe de Estado", señala en la carta.
En unas declaraciones ofrecidas a Radio Globo, el mandatario reiteró su decisión: "Es una disposición firme de no aceptar ya ninguna restitución que humille al pueblo hondureño ocultando la ilegalidad en que vivimos y la represión militar a que está sometido el pueblo más humilde", expresó.
El pasado 28 de junio el presidente Zelaya fue sacado del poder y enviado a Costa Rica por un golpe de Estado dirigido por el mandatario de facto, Roberto Micheletti.
Desde ese momento grupos solidarios con Zelaya se han mantenido en las calles exigiendo el retorno del jefe del Estado hondureño electo constitucionalmente.
Luego, el 21 de septiembre el mandatario constitucional regresó a Tegucigalpa donde encontró refugio en la embajada de Brasil. Desde este momento hasta la actualidad se han mantenido varios procesos de diálogo incluyendo el Tegucigalpa-San José pero estos han sido irrespetados por el gobierno golpista.
A principios de este mes Micheletti designó un "Gobierno de Unidad" que sólo contó con la presencia de aquellos que apoyaron al mandatario de facto y es él el que se mantiene al mando actualmente.
La restitución de Zelaya sería discutida por el Congreso hondureño según lo pactado por el acuerdo Tegucigalpa-San José, pero en este momento este organismo se encuentra de receso con lo que ha retrasado el proceso.
El próximo 29 de noviembre se harán los comicios presidenciales pero Zelaya no entregará la banda porque no ha sido restituido, lo cual va en contra de todas las conversaciones puesto que de no estar el presidente constitucional en el poder ningún país avalará las elecciones.
Un senador demócrata estadounidense consideró que el acuerdo fracasó por el abrupto cambio de postura de la Casa Blanca frente a Honduras, al anunciar que avalaría los comicios, independientemente de si Zelaya era restituido o no.
"Reconocer las elecciones aún cuando el régimen de facto no cumpla con sus compromisos causó el fracaso del acuerdo que el propio Departamento de Estado ayudó a negociar", dijo John Kerry, jefe de la comisión de Relaciones Exteriores del Senado.
Diferentes gobiernos latinoamericanos, la Organización de Naciones Unidas (ONU), el Grupo de Río y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) anunciaron que continuarán con su postura de no avalar el proceso si no es restituido el orden institucional.
Zelaya mantiene la lucha pacífica junto a las fuerzas populares agrupadas en el Frente de la Resistencia contra el golpe.
"En mi condición de Presidente electo por el pueblo Hondureño, reafirmo mi decisión que a partir de esta fecha cualquiera que fuera el caso, yo no acepto, ningún acuerdo de retorno a la presidencia, para encubrir el golpe de Estado", señala en la carta.
En unas declaraciones ofrecidas a Radio Globo, el mandatario reiteró su decisión: "Es una disposición firme de no aceptar ya ninguna restitución que humille al pueblo hondureño ocultando la ilegalidad en que vivimos y la represión militar a que está sometido el pueblo más humilde", expresó.
El pasado 28 de junio el presidente Zelaya fue sacado del poder y enviado a Costa Rica por un golpe de Estado dirigido por el mandatario de facto, Roberto Micheletti.
Desde ese momento grupos solidarios con Zelaya se han mantenido en las calles exigiendo el retorno del jefe del Estado hondureño electo constitucionalmente.
Luego, el 21 de septiembre el mandatario constitucional regresó a Tegucigalpa donde encontró refugio en la embajada de Brasil. Desde este momento hasta la actualidad se han mantenido varios procesos de diálogo incluyendo el Tegucigalpa-San José pero estos han sido irrespetados por el gobierno golpista.
A principios de este mes Micheletti designó un "Gobierno de Unidad" que sólo contó con la presencia de aquellos que apoyaron al mandatario de facto y es él el que se mantiene al mando actualmente.
La restitución de Zelaya sería discutida por el Congreso hondureño según lo pactado por el acuerdo Tegucigalpa-San José, pero en este momento este organismo se encuentra de receso con lo que ha retrasado el proceso.
El próximo 29 de noviembre se harán los comicios presidenciales pero Zelaya no entregará la banda porque no ha sido restituido, lo cual va en contra de todas las conversaciones puesto que de no estar el presidente constitucional en el poder ningún país avalará las elecciones.
Un senador demócrata estadounidense consideró que el acuerdo fracasó por el abrupto cambio de postura de la Casa Blanca frente a Honduras, al anunciar que avalaría los comicios, independientemente de si Zelaya era restituido o no.
"Reconocer las elecciones aún cuando el régimen de facto no cumpla con sus compromisos causó el fracaso del acuerdo que el propio Departamento de Estado ayudó a negociar", dijo John Kerry, jefe de la comisión de Relaciones Exteriores del Senado.
Diferentes gobiernos latinoamericanos, la Organización de Naciones Unidas (ONU), el Grupo de Río y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) anunciaron que continuarán con su postura de no avalar el proceso si no es restituido el orden institucional.
Zelaya mantiene la lucha pacífica junto a las fuerzas populares agrupadas en el Frente de la Resistencia contra el golpe.
Fuente: teleSUR-AFP/ dag - MM
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