El ejército y la policía atacaron nuevamente “de forma salvaje” a maestros, alumnos y padres de familia que protestan, en la capital del país desde hace más de 22 días, en defensa Su Instituto de Previsión, el IMPREMA y la educción publica.
Los policías se metieron a las instalaciones de la Universidad cuando toda la población se encontraba desmovilizada de la protesta, y mientras huía de la persecución montada por militares y policías, después de una lluvia de bombas dirigidas a las instalaciones de la Institución educativa.
Los militares ingresaron a las instalaciones de la Universidad Pedagógica Nacional, para revisar aula por aula en busca de manifestantes, después de lanzar centenares de bombas lacrimógenas, adentro de las aulas universitarias como en los alrededores de la universidad.
En el ataque, se llevaron de encuentro a niños y toda persona que se encontraban a su paso, no importando si estas participaban o no en la movilización, apoyada por el Frente Nacional de Resistencia Popular FNRP.
Por el momento se desconoce el informe de heridos y de personas detenidas.
La represión fue dirigida directamente por el sub jefe general de la policía Rene Maradiaga Panchame, acusado por organizaciones de derechos humanos de ser parte del temido Batallón 3-16, que desapareció cerca de un centenar de hondureños en la década de los 80.
FNRP condena ataque del gobierno
El Frente Nacional de resistencia Popular, condenó la represión militar policial, realizada por el gobierno de Porfirio Lobo, en contra de maestros y maestras, mediante un comunicado.
El dirigente campesino y dirigente del FNRP, Rafael Alegría, criticó la represión y agregó, “que si pensaron que iban a detener esta lucha lanzando bombas lacrimógenas, o pegando toletazos, se equivocaron, por que este movimiento no es el gobierno el que lo va parar” aseguró.
Alegría manifestó que si alguien creía antes en ese discurso de reconciliación, ahora nadie lo hará por que lo que reina es el garrote, es el toletazo, no hay tal reconciliación, lo que hay es una represión generalizada en contra del pueblo.
Por su parte la coordinadora del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras COFADEH, Berta Oliva, expresó su indignación por los hechos ocurridos en contra del magisterio, “antes se escondían los sicarios, hoy no, y además disfrutan cuando tienen a sus presas”, se quejó
Oliva expreso que los criminales que visten uniforme, hoy se imponen como autoridad.
Hospitales públicos se niegan atender heridos
Una vez más el Hospital Escuela y el hospital de Seguro Social, fueron denunciados de negarle la atención a las personas que llegaban heridas o intoxicadas por los gases lacrimógenos.
La acción fue calificada como un hecho grave por la coordinadora del COFADEH, Berta Oliva, porque “negar la asistencia en un hospital público eso es grave eso solo se da cuando se han perdido todos los derechos, eso es tortura contra todos los hondureños”.
Oliva denunció que los militares y policías llevaron a los detenidos, a centros de detención ilegal, ubicados frente a la Casa de Gobierno en el lugar conocido como Plaza Libertad y otros a las instalaciones de la policía de tránsito, donde se les obligaba donde les obligan a lavarse, las heridas y los gases, para borrar la evidencia.
“No podemos pensar que son muestras de avance, miramos a honduras reflejado como el país más salvaje”, dijo olivan y agregó que estamos ante un país con todo lo que son los derechos humanos violentados.
Oliva critico que en materia de derechos humanos, está haciendo en pleno siglo XXI, lo que no hizo en los años ochenta.
La defensora de los derechos humanos, expresó que cuatro horas después de la represión, no habían podido contar a tantas mujeres que corrieron, que no han llegado a las casas donde se hospedaban, y se pregunto si estarán recibiendo torturas.
“Condenamos a quien da la orden y es necesario señalar a quienes les dan los medios para que atropellen al pueblo, mientras nos están diciendo que no hay plata ni para tapar un bache, si hay plata para reprimir al pueblo”, se quejó.
Mientras el dirigente del Frente Nacional de Resistencia Popular FNRP, Carlos H. Reyes, acusó a la Embajada norteamericana en Tegucigalpa de dirigir la represión en contra del pueblo, como lo hizo en la década de los 80
Acusan a Cruz Roja nuevamente
Maestros que se encontraban en la manifestación acusaron nuevamente a la Cruz Roja Hondureña de pasar con cuatro ambulancias por la Universidad Pedagógica antes de iniciarse la represión en contra de los manifestantes.
El paso de las ambulancias ocurrió como el anuncio que hizo el cardenal en cinco de septiembre, recordó la defensora de los derechos humanos Berta Oliva.
“Cuando nosotros acordamos es que estábamos siendo totalmente atacados como si se tratara de una guerrilla”, dijo una profesora que se encontraba en el lugar.
Fuente: www.resistenciahonduras.net
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