Seis policías que llegaron en motorizadas, persiguieron a cinco jóvenes que corrieron cuando les vieron llegar en patrullas motorizadas y sintieron temor de su presencia, en la huida capturaron a Bryan Alexis, de 13 años, a quien un agente cargó su arma y le apuntó, mientras le ordenó tirarse al suelo, la noche del martes, en una colonia de la capital.
En el camino, los agentes también se llevaron detenido a un joven de 17 años por estar parado en una esquina de la colonia Honduras a quien solamente le dijeron “caminá vos también”.
Eran las siete de la noche con unos 15 minutos de ayer martes, cuando Bryan se encontraba con cuatro amigos tomándose un refresco con pan, en unas gradas de la colonia Honduras, donde usualmente se reúnen para conversar y pasar el tiempo como parte de sus derechos a tener esparcimiento, libertad de movilización y asociación.
Pero su tranquilidad fue interrumpida cuando unos seis agentes de la Policía Preventiva, en motorizadas llegaran a esa colonia, lo muchachos salieron corriendo por el temor que sintieron de ver a los policías, esa reacción tiene su antecedente en que la noche del domingo cinco jóvenes fueron ejecutados, unas cuadras arriba del lugar donde se encontraban los muchachos, la noche del domingo, cuando llegaron cuatro hombres vestidos de militar y los eliminaron, según relato de sus familiares.
“Empecé a correr para salvarme y llegar a mi casa, dos agentes me seguían y cuando toqué el timbre de mi casa el agente que me dio alcance cargó su arma y me dijo que me tirara al suelo, lo hice y aún así me pegó una manotada en la espalda”, dijo Bryan, todavía con el miedo que le genera el ver cerca de su colonia a los policías.
Según su madre Sandra, ella estaba atendiendo el salón de belleza y peinaba a una clienta cuando escuché el ruido, levanté la cortina y ví a mi hijo tirado en el piso, cuando me asomé a la puerta observé como un policía lo tomaba de la camisa y se lo llevó detenido, asustada le pedí explicaciones sobre la captura, además de explicarle que era su madre y que mi hijo es menor de edad, dijo.
Sin embargo eso no fue importante para los agentes que llevaban al muchacho casi a rastras, de la parte de atrás de la camisa, de nada sirvió la súplica, “hablaremos con usted hasta que estemos en la posta de la Kennedy”, relató la madre del chico.
Por el temor de la captura y las consecuencias a la integridad física de Bryan, es que doña Sandra salió tras los policías a quienes preguntó en qué transporte lo iban a llevar, para lo que ellos pidieron una patrulla policial, cuando ella se subió a la misma una mujer policía la insultó y le dijo que se fuera a pie, pero su coraje de madre desafió el abuso de autoridad de los uniformados y permaneció en la patrulla y se fue junto a su hijo a la sede policial.
Cuando ví que lo metieron a la posta les recalqué que era un menor de edad y que no podían detenerlo. A él y al otro muchacho los dejaron en un pasillo, y salieron gracias a la intervención de una vecina que es abogada.
La represión contra los jóvenes son una constante desde el 28 de junio en que se llevó a cabo el golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya Rosales. Las postas de policía en determinados días se han visto atestadas de muchachos a quienes han capturado en sus barrios y colonias por el solo hecho de estar reunidos y conversar.
La madre del muchacho presentó la denuncia ante el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Hondura, COFADEH, organización que ya está presentando la misma ante la Fiscalía del Ministerio Público.
Fuente: Defensores en línea
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