La represión surgida en Honduras tras el golpe puede impulsar a emigrar al Norte
Por Jorge Morales Almada 2009-08-24 La Opinión
De prolongarse la crisis política en Honduras por el golpe de estado que ya cumplió 53 días, se estima que muchos ciudadanos de ese país centroamericano pueden ser impulsados a emigrar hacia el norte con la esperazanza de lograr asilo político en Estados Unidos o México.
Sin embargo, expertos advirtieron que el proceso de aceptación para asilo político es complicado y muchos podrían ser regresados a su país si no comprueban la circunstancia particular de persecución o miedo fundamentado hacia ellos.
"Existe mucha confusión y el asilo no es algo que protege en general por condiciones violentas en el país, tiene que ser un peligro individualizado para poder calificar", dijo Daniel Sharp, director legal del Centro de Recursos Centroamericanos (CARECEN).
La salida de muchos hondureños de su país debido al golpe de estado, comentó Sharp, no sería sorpresa debido a los antecedentes de violencia política que han existido en Centroamérica.
"Honduras no ha entrado en guerra civil, pero sí hay mucha gente que corre peligro", mencionó. "Pero si llegan aquí a solicitar el asilo... pues el proceso no es fácil; si cruzan ilegalmente van a ser expuestos a un proceso de deportación, que es donde un abogado puede tratar de demostrar un caso, que hay miedo de regresar".
De 1999 a 2008, sólo 669 hondureños han sido beneficiados con el asilo, según datos del Servicio de Ciudadanía en Inmigración de Estados Unidos (CIS).
El año pasado se estimaba que vivían unos 300,000 hondureños de indocumentados en el país.
Ante lo difícil que es el proceso de aceptación de asilo, el director legal de CARECEN consideró que el Estatus de Protección Temporal (TPS) podría ser una opción para dar cabida legal a los hondureños que posiblemente estarán huyendo por el conflicto.
Fuente: www.impre.com
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