El papel de Estados Unidos en la crisis de Honduras

Por Raúl Molina Mejía

El 7 de julio, la Red por la Paz y el Desarrollo de Guatemala (RPDG) envió una carta abierta al presidente Obama, para opinar sobre el papel de Estados Unidos en Honduras. Traslado algunos extractos:

"Honduras ha sido sometida una vez más a un golpe militar, organizado por la oligarquía hondureña y sus aliados y, según varios informes, apoyado por funcionarios y personal de las fuerzas armadas de los Estados Unidos", pese a que la posición de Obama está "cristalinamente clara: los Estados Unidos reconocen firmemente al señor Manuel Zelaya como Presidente legítimo de Honduras y él debe regresar lo antes posible a ejercer su mandato". "Nos preguntamos, sin embargo, si existen actores estadounidenses que tratan de causarle una situación embarazosa a su gobierno".

"En 1961, cuando asumió la presidencia Kennedy, el gobierno republicano que terminaba dejó en marcha un plan para invadir a Cuba y derrocar a Castro. Parece, según fuentes confiables, que un plan para socavar al presidente Zelaya también fue dejado en marcha, esta vez por el gobierno de Bush, con la esperanza de que cualquier enfoque nuevo hacia América Latina y el Caribe fuese arruinado... se lanzó una campaña similar a la que la CIA condujo contra el presidente Árbenz de Guatemala en 1954. Los ataques por grupos de extrema derecha, los sectores conservadores de la Iglesia Católica, los adinerados y los medios de prensa comenzaron a finales del año pasado. Hoy, el antiguo fantasma de los golpes militares en América Latina está de vuelta".

"Los militares hondureños y sus fuerzas aliadas contrarias a la democracia no se hubiesen atrevido a enfrentar la voz unánime de la comunidad internacional, expresada tanto en la OEA como en la ONU, a menos que se les hubiese prometido apoyo de sectores importantes de extrema derecha... Hay demasiados indicios que no podemos ignorar con relación a las maniobras de la CIA y el apoyo de Palmerola a sus aliados hondureños adiestrados en la tristemente famosa Escuela de las Américas".

"Los golpistas hondureños no tienen posibilidades de tener éxito si la comunidad internacional actúa con vigor y determinación. Para ello, el papel de Estados Unidos es de la mayor importancia. Se pueden aplicar medidas sucesivas para ejercer presión sobre el gobierno de facto... en primer lugar, no otorgar visas para entrar a Estados Unidos a los ciudadanos hondureños y cancelar las visas de todos los líderes militares y civiles involucrados. En segundo lugar, prohibir para el futuro inmediato viajes de aerolíneas entre Estados Unidos y Honduras. Estas medidas, acompañadas de declaraciones más firmes de su parte demostrarían que las decisiones tanto de la OEA como de la ONU tienen importancia y peso. Ciertamente, toda ayuda militar y económica debe ser suspendida. Y finalmente, si en una semana no ocurren cambios, debería retirarse el Embajador en Honduras".

"El pueblo hondureño ha estado en las calles desde el primer momento de este golpe y ya se han perdido algunas vidas. Los líderes del mundo también comparten la responsabilidad, incluida la de proteger contra las violaciones de los derechos humanos. Debemos impedir un baño de sangre y restablecer el gobierno legítimo del presidente Zelaya".



Fuente: www.lahora.com.gt



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